Maestros adheridos a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), estudiantes, integrantes de organizaciones sociales y ciudadanos marchan en Tuxtla Gutiérrez en contra de las reformas estructurales y el llamado gasolinazo.

La marcha, que congrega a miles de manifestantes, inició en el parque Chiapasiónate, en la entrada oriente de la ciudad, y concluirá con un mitin y pronunciamientos en el zócalo.

Con mantas y pancartas los inconformes repudian el alza de los precios a los combustibles y el impacto en la economía popular, principalmente en “estados pobres y rezagados como Chiapas”.

José Luis Escobar, vocero de la Sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), expresó que el magisterio democrático y el movimiento popular rechazan el paquete de reformas estructurales que “hambrean, depredan y vuelven miserable al pueblo de México”.

Los maestros, aseguró, no sólo defienden la educación pública, sino pugnan y luchan por la defensa de los derechos básicos y por “la dignidad humana”.

Las reformas estructurales, enfatizó, cancelaron los derechos a la alimentación, la salud y la educación, “gracias a la política hambreadora” del gobierno.

El representante magisterial señaló que en las protestas se involucran además de maestros de la Sección 7, educadores disidentes de la estatal Sección 40, del Colegio de Bachilleres, entre otros niveles de educación media-superior.

Participan además estudiantes de escuelas normales y de universidades, burócratas e integrantes diversas organizaciones sociales en el estado.

spb

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