La primera lluvia del temporal provocó que en la colonia Potrero San Miguel, del municipio de El Salto –donde hace 8 años murió el niño Miguel Ángel López Rocha tras caer a las aguas contaminadas del río Santiago–, la tierra se pusiera gris y se levantara una nube de humo con olor a amoniaco que causó mareos, vómitos y problemas gastrointestinales a los habitantes.

Los vecinos de la colonia se percataron de que la reacción química provenía del sitio donde en noviembre pasado se colocó una fundidora para procesar metales y extraer aluminio y bronce.

“En principio era puro humo, pero ahora con las aguas se activó su tierra y huele muy fuerte a amoniaco y nos ha perjudicado mucho; además, el señor escarba en su predio, echa su desperdicio y luego lo tapa con tierra buena, y ahí donde estamos es una zona acuífera, de ahí sacamos el agua y el agua que era buena para tomar ya está contaminada”, señaló Desiderio Guevara Tolentino, uno de los vecinos afectados.

Explicó que acudieron ante las autoridades municipales para denunciar la situación y mostró los documentos en que se muestra que tras la visita de las direcciones de Inspección de Reglamentos, Ecología y Protección Civil se colocaron sellos de clausura en el área de la bodega y la fundidora de la empresa por falta de permisos y dictámenes ambientales; sin embargo, aseguró que ésta sigue trabajando.

“Fueron y supuestamente le cancelaron una parte pero no fue cierto, le pusieron sellos falsos porque los quitaron y ya están trabajando, trabajan diario de las 4 de la mañana a las 5 de la tarde”, afirmó.

Guevara Tolentino indicó que la empresa no tiene tiene nombre ni registro, por lo que es a todas luces irregular y también fue denunciada ante la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente, que el 22 de junio pasado respondió –a través de un oficio firmado por el titular de la dependencia, David Cabrera Hermosillo– que el asunto no está dentro de su competencia y por ello lo derivó a la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

Ante esta situación, este miércoles los vecinos de la colonia Potrero de San Miguel acudieron a las instalaciones de la delegación de la dependencia federal a entregar una nueva denuncia popular sustentada con fotografías y fundamentos legales para pedir que se clausure la empresa que los está afectando.

“Solicitamos que nos ayuden, a ver que se puede hacer por nosotros, nosotros somos los afectados ya que en El Salto no nos hicieron caso, a ver si aquí nos hicieran el favor”, dijo Guevara Tolentino.

Los vecinos indicaron que el propietario de la empresa se llama Silvano Aguirre González y se han acercado a él en varias ocasiones, pero no ha cumplido con el compromiso de llevarse todo el desperdicio que genera su empresa y levanta el humo tóxico, pues sólo lo ha enterrado en su propiedad.

afcl

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses