Javier Pérez Durón, fiscal general del estado, precisó que la dependencia tiene dos fosas comunes en Cuautla y ambas tienen los permisos correspondientes para funcionar. También dijo que está en curso la investigación por la inhumación irregular de 105 cuerpos en la fosa del poblado de Tetelcingo, uno de las dos que tienen en esa región.

Aseguró que el camposanto de Tetelcingo es propiedad de un particular, pero está registrado en Cuautla y cuenta con permiso de autoridades para su funcionamiento, sin embargo, el fiscal omitió señalar qué autoridades validan la operación del panteón.

“Los cuerpos que se hallan en el panteón de la ciudad de Cuautla están debidamente identificados y relacionados con la carpeta de investigación correspondiente, de acuerdo con la información proporcionada por la Coordinación Central de Servicios Periciales dependiente de la Fiscalía”, puntualizó.

Pérez Durón dijo se abrió una investigación con relación a la inhumación indebida de Oliver Wenceslao Navarrete Hernández, quien fue debidamente identificado por sus familiares a una semana de que su cuerpo fue encontrado con signos de tortura, en Ayala, municipio colindante a Cuautla.

Oliver fue privado de su libertad, en mayo de 2013, por cuatros sujetos. Su cadáver fue inhumado en la fosa común de Tetelcingo en marzo de 2014 y exhumado en diciembre del mismo año para ser entregado a sus deudos.

En conferencia de prensa, Pérez Durón afirmó que se aplicarán las sanciones administrativas o penales de comprobarse la responsabilidad de servidores públicos en la inhumación, ya sea por omisión o comisión de actos irregulares.

Por ahora, dijo, las carpetas no abrirán al público en general, pero sí a familiares de desaparecidos, para realizar estudios de genética y si hay coincidencia de parentesco.

El fiscal recalcó el hecho de que se realizaron las pruebas que exige el protocolo de inhumación como dactiloscopía, odontogramas y ADN, las cuales, dijo, en su caso se harán públicas.

Desestimó que el caso sea atraído por otra dependencia para su investigación a pesar de que hay una queja radicada por la familia de Oliver Wenceslao.

Pérez Durón dijo que trabaja el caso en coordinación con la Comisión de Atención de Víctimas y de la Comisión de Derechos Humanos y negó que hayan recibido alguna solicitud para cotejar pruebas genéticas de familiares de desaparecidos.

Anuncia cambios. Por la mañana el fiscal se reunió con abogados del Foro Morelense y ahí anunció una reestructuración en la dependencia, comenzando por la Coordinación de Servicios Periciales, una de las áreas señalada como responsable de ordenar la inhumación de 105 cadáveres en una fosa común del poblado indígena de Tetelcingo, en Cuautla.

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