Clínica de Periodismo

La noche del viernes, el español Nacho Vegas cant+O con furia: “¿Dónde está nuestro pan, patrón?, ¿dónde quedó todo ese dinero?”, dedicando “Polvorado” a “la gente que sufre y no tiene derechos”.

En el concierto que presentó en el Teatro Metropólitan, Nacho expresó su sentir sobre los problemas que existen en el mundo, incluyendo la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y los migrantes, dedicándoles “Ciudad vampira”. “Vivo en la ciudad más triste de este país, es tan triste esta ciudad que, por aquí, cuando alguien se ríe, lo hace mal”.

Al hablar de desapariciones, crímenes de estado, asesinatos, Vegas cantó “Runrún”. Mostró así su enojo por medio de las canciones. El español también dijo: “En la tele trasnmiten la muerte violenta de alguien molesto para la sociedad, y el presentador hace una mueca, abre la boca y sólo suena un crac”. Luego interpretó “Cómo hacer crac”. Con un acordeón, tres guitarras, una batería y un piano; la banda qeu lo acompañó comenzó a cantar “Gang bang”; con un teatro lleno.

Con cerveza en mano, la gente lloró con “La gran broma final”. “No hay más que alivio y dolor” coreaba el público con “Perdimos el control”.

Pero no sólo presentaron sus primeras creaciones, también cantaron “Resituación”, en el cual habla de la movilización de la población ante la actual situación de crisis que se vive.

Con un sentimiento de vacío, Nacho Vegas cantó el tema “Luz de agosto”, de su nuevo disco Canciones populistas”.

El público estuvo de pie la mayor parte del concierto del viernes que culminó en el “Mercado de Sonora”.

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