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El Centro Cultural Roberto Cantoral será escenario del Latin Grammy Acoustic Session con Camila y Debi Nova en un evento con la intención de dejar de lado la excesiva producción musical para enfocarse en deleitar al público con un ambiente bohemio e íntimo.

Ambos artistas son muy fuertes musicalmente hablando, se trata de gente de quien siempre hemos recibido mucho.

La labor que hacen es transportarse desde donde estén para tocar y hacer felices a las personas y con eso contribuir a reforzar la Academia y ayudar gente sin buscar ningún tipo de protagonismo.

“No cobramos y los artistas tampoco, van porque saben que, si nos apoyan, algunos patrocinadores se interesan por la marca, nos donan dinero y lo podemos pasar a becas para estudiantes o actividades de promoción musical”, expresó Gabriel Abaroa, Presidente de la Academia Latina de Grabación, del concierto a realizarse la primera semana de junio.

Sin importar la fecha en que los Grammy Latinos sean, de estos eventos es como salen los recursos para una de las 40 becas que la institución otorga a las jóvenes promesas como es el caso de la denominada Enrique Iglesias, con la cual se le dio a una estudiante mexicana un apoyo de poco más de 200 mil dólares para una carrera completa y su manutención.

La idea, recuerda Abaroa, se dio en una reunión en donde el intérprete de “Bailando” pidió apadrinar la ayuda a algún estudiante.

“Él fue el primero y básicamente puso dinero, pidió estar el día que se anuncie y cuando se gradúe, además de estar pendiente de los avances. Ha quedado tan motivado que nos ha pedido dar más becas; le dijimos que estamos emocionados pero queremos dar oportunidad a otros artistas que se vayan sumando a la causa”, afirmó, dejando abierta la posibilidad que cambie por el nombre de otros artistas.

Nueva edición

Aunque actualmente se encuentran en el proceso de inscripciones, donde calculan el cierre con unos 12 mil productos, los organizadores de la ceremonia más importante de la música latina no han pensado en lo que será su edición 16.

“Dependemos de los musicales y no podemos pensar en nada hasta que salgan las nominaciones porque de lo que se trata es que sean los propios nominados los que se presenten y que un artista ajeno forme parte exclusivamente si es invitado por alguno de ellos”, argumentó.

Pese a que tienen un contrato con la ciudad de Las Vegas hasta el año 2016, el Grammy Latino no está negado a moverse a otro lugar, ya que la disposición está a lo que se están efectuando acercamientos.

“El costo financiero es enorme porque utilizamos una gran cantidad de técnicos expertos en su propio campo de diversos lugares para estar en el nivel competitivo y mover a toda esa gente nos implica una serie de gastos desde transportación aérea, cuestiones aduanales y fiscales que no estamos preparados hacer, lo estamos buscando pero no sé cuándo”.

Sin embargo, reconocen que hay otras premiaciones en países como México, España, Argentina o República Dominicana que salen de EU para hacer honor a países latinoamericanos. “Nosotros aplaudimos cualquier iniciativa digna que tienda a reconocer a la música, no nos podemos sumar porque la forma como esta institución da sus premios es totalmente diferente, casi todos lo hacen con base en popularidad y aquí son otros valores”.

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