Mi historia de formación académica, como la de una gran parte de los mexicanos, se debe a la educación pública. Por ello, cuando se me invitó a contribuir con Fundación UNAM, no lo dudé.

Me han acompañado los valores de la UNAM: la visión humanista que te permite acceder a formas progresistas de pensamiento

Es admirable el apoyo que da a programas de becas para estudiantes que lo necesitan, lo que permite movilidad social y una comunidad más equitativa.