Con todo y la campaña denominada ‘Abrazados por el Futbol’, que tiene como objetivo concientizar a los aficionados, ese grito que ya es hábito en los estadios mexicanos —cada que despeja el portero rival— y es considerado homófobo, vuelve a lastimar el bolsillo de la FMF.

La Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA) multó, de nueva cuenta, a la Federación Mexicana de Futbol debido a cánticos, considerados discriminatorios, realizados durante dos encuentros de la Selección Nacional.

El castigo económico, que supera los 35 mil 240 dólares, fue dictaminado debido a dos incidentes evidenciados a través del Sistema de Monitoreo Antidiscriminación del órgano que rige al balompié en todo el mundo.

Muchos aficionados asistentes al cotejo eliminatorio del 29 de marzo, frente a Canadá en el Estadio Azteca, demostraron que se necesita mucho más que una campaña para erradicar el hoy popular grito de ¡“Eeeeh pu...!”. Esa noche, el representativo nacional se llevó el triunfo (2-0), con goles de Andrés Guardado y Jesús ‘Tecatito’ Corona.

La Federación Mexicana de Futbol, contra la que se abrió un expediente disciplinario, ya había sido castigada por este tipo de expresiones de los aficionados durante enero. En aquella ocasión, la penalidad designada fue de poco más de más de 20 mil dólares.

Eso provocó que, justo para aquel duelo con los canadienses, se echa-ra a andar una campaña que no ha surtido efecto.

Pese al castigo, y un día antes de enfrentar a Paraguay en juego de preparación rumbo a la Copa América Centenario, Juan Carlos Osorio afirma que la máxima instancia del futbol debería estar más ocupada en otras situaciones.

“La FIFA tiene otros tópicos mucho más importantes, más preocupantes, en qué trabajar, como en todo lo que sabe que aconteció”, asegura el director técnico colombiano del Tricolor. “Es algo que está muy en la cultura de los mexicanos y no le hace daño a nadie, comparado con otras cosas como las barras bravas y otros países más violentos. Debería prestarles más atención”.

Dura sanción a Chile y Croacia. La FIFA también anunció diversas sanciones a las federaciones de Chile, Perú, Paraguay, El Salvador, Honduras y Croacia por “la conducta discriminatoria y antideportiva de sus seguidores”.

Uno de los castigos más fuertes fue para el estadio Nacional de Santiago de Chile, donde el campeón de la Copa América no podrá jugar su próximo partido oficial, ante Bolivia el 6 de septiembre, por la clasificación al Mundial de Rusia 2018.

El inmueble también fue sancionado con un posible segundo partido, que podrá hacerse efectivo en caso de producirse nuevos incidentes en un plazo de dos años.

La federación chilena fue castigada, además, con una multa de 30 mil 170 dólares, debido a los cantos homófobos de la hinchada local.

Según la FIFA, los cantos “ya venían precedidos de sanciones por incidentes similares”.

La Asociación de Futbol de Chile (ANFP) anunció que apelará la sanción y calificó la decisión de la FIFA como “insólita”.

Por el mismo motivo fueron castigadas también las federaciones de Honduras (40 mil 200 billetes verdes), El Salvador (35 mil 240), Paraguay (20 mil) y Perú (15 mil).

En el caso de Croacia, el equipo fue sancionado para jugar a puerta cerrada los dos próximos clasificatorios rumbo al Mundial de 2018. El primero contra Turquía, el 5 de septiembre, y el siguiente contra Islandia, el 12 de noviembre. A eso hay que añadirle una multa de 150 mil dólares. 

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