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“Empecé a trabajar el barro y, a la distancia, me di cuenta de lo importante que era el material mismo, de los temas y reflexiones conceptuales que tienen que ver con el proceso y con el material. (El proceso) se empieza a volver la justificación de la obra terminada”, relató ayer el artista Javier Marín en una charla con los medios para presentar las exposiciones Terra. La materia como idea y Corpus, que llegarán al Palacio de Iturbide y el Antiguo Colegio de San Ildefonso.

Las exhibiciones representan una ocasión única para “redimensionar, valorar y apreciar” su trabajo, de acuerdo con Ery Camara, curador de la muestra que exhibirá San Ildefonso. Presentadas en colaboración con la Fundación Javier Marín, ambas revisan cerca de 30 años de trabajo del artista nacido en Uruapan, Michoacán, en 1962.

En el Palacio de Iturbide, sede de Fomento Cultural Banamex, se exhibirá Terra con cerca de 100 piezas donde predomina el trabajo de obra en barro. Esta muestra es curada por Silvia Zárate y se exhibirá entre el 15 de octubre y el 17 de enero de 2016.

La exposición Corpus, en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, retoma el proceso como uno de los elementos más importantes para Marín, el proceso en cuanto a relación con los materiales, trabajo con otras personas y como condición determinante de una obra de arte, por encima incluso del resultado. Reunirá 49 obras, entre esculturas e instalaciones en distintos tamaños y materiales: bronce, madera, resina de poliéster y mezclas de materiales orgánicos que reinterpretan la figura humana. Se inaugurará el 19 de noviembre y estará hasta el 20 marzo de 2016.

Las dos exhibiciones resaltan la inquietud de Marín por dialogar con la arquitectura y marcarán una ruta en el Centro Histórico; se evalúa que a ambas se sume una tercera exhibición en la esquina de Moneda, frente al Sagrario, donde estarían otras esculturas del artista.

Junto a las exposiciones se publicarán dos catálogos bilingües con textos que revisan la obra de Marín.

El escultor se refirió al tema de la falsificación de obras de arte después de que esta semana tuvieron lugar decomisos de piezas falsas de su hermano, el también escultor Jorge Marín, y donde también había falsos del propio Javier y de otros artistas.

Opinó que se trata de un “asunto de responsabilidad social” para los artistas: “Si queremos seguir trabajando en esto, si vamos a seguir construyendo a partir de la obra plástica, hay que cuidar el trabajo de los artistas en la sociedad. Esto nos afecta, es ilegal y hay que enfrentarlo. A través de la Fundación Javier Marín hemos intentado cosas para parar esto, como intentar modificar la ley para que sea más específica respecto a la obra de artistas plásticos”.

Marín señaló que aunque estas acciones no van a desaparecer la falsificación, hay que “intentar que no sea una cosa que se salga de control y que acabe afectando gravemente la obra de los artistas de un país o del mundo”. Dijo que él y otros han puesto denuncias y reconoció que la titular de la Procuraduría General de la República, Arely Gómez, ha sido muy sensible a este problema.

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