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El segundo día de visita a la Capilla Sixtina ubicada en la Plaza de la República, no resultó multitudinaria como se esperaba. Alrededor de las 15 horas las vallas que se colocaron a la salida del sitio, lucían prácticamente vacías. Y, adentro, alrededor de unas 300 personas esperaban su turno de las 15:30 horas. El ingreso, por la tarde, fluyó sin contratiempos.

La página para adquir los boletos de entrada para la réplica de la Capilla Sixtina (www.superpase.com) estuvo deshabilatada por varias horas, debido a que en un momento hasta 15 mil personas buscaron acceder, lo que provocó su colapso.

“Es una situación que no se puede controlar por la cantidad de ingresos, en un momento pudo haber más de 15 mil de personas, se rebasó, pero estamos tratando de ampliar su capacidad”, indicó Antonio Berumen, director del proyecto.

Alrededor de las 19 horas se restableció el servicio de la reserva de boletos por internet y, a través de Facebook, los organizadores pidieron disculpas al público por los contratiempos.

Berumen aseguró a este diario que acceden unas dos mil personas por hora, sin embargo los encargados de organizar las filas de acceso a la réplica de la Capilla Sixtina indicaron que cada 15 minutos entran entre 300 y 400 personas. Mientras que el área de relaciones públicas precisó que los grupos son de entre 200 y 250 personas.

Durante un recorrido se pudo observar que cada hora ingresan alrededor de mil 400 personas por hora.

La espera máxima para ingresar al recinto, colocado en la Plaza de la República del Monumento a la Revolución es de 25 minutos.

De acuerdo con algunos visitantes, desde la semana pasada apartaron su entrada para el día de ayer, por lo que no hubo inconvenientes para entrar. Además, en las taquillas había pocas personas formadas.

Al recorrido pudieron ingresar bebés y niños. Además, las personas con discapacidad y de la tercera edad son atendidos a la brevedad.

La primera impresión de los visitantes es que la tenue iluminación en cálido no permite apreciar la magnitud de la copia de los frescos de Miguel Ángel. También que el calor es agobiante y, aunque los organizadores son amables, el tiempo de estancia es corto.

Al inicio se proyecta un video explicativo y se iluminan las representaciones que va indicando; luego, el visitante puede apreciar las reproducciones por alrededor de 15 minutos. El asombro es generalizado, una persona dijo que los colores se veían más vivos que en el original.

La réplica de la Capilla Sixtina podrá visitarse hasta el 30 de junio.

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