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La economía mexicana aún no da señales de una recuperación sólida, pues en febrero y marzo reportó un comportamiento mixto, de acuerdo con resultados del sistema de indicadores cíclicos que elabora el Inegi.

En el sistema de indicadores cíclicos, el componente coincidente refleja el estado general de la economía, mientras que el adelantado busca señalar anticipadamente la trayectoria del indicador coincidente, particularmente sus puntos de cambio.

Dicho sistema permite dar seguimiento oportuno a la economía mexicana, explica el instituto.

En febrero de 2016 el indicador coincidente se posicionó ligeramente por debajo de su tendencia de largo plazo, al registrar un valor de 99.9 puntos y una variación de 0.01 puntos respecto al mes anterior. Por segundo mes consecutivo, este indicador reportó una tasa positiva, luego de cuatro meses a la baja.

El indicador adelantado, que busca señalar anticipadamente la trayectoria del indicador coincidente, se situó en marzo de 2016 debajo de su tendencia de largo plazo al observar un valor de 99.4 puntos y una disminución de 0.03 puntos con respecto al pasado mes de febrero. Con este resultado, el indicador adelantado acumula 18 meses a la baja.

Ambos indicadores siguen sin superar su tendencia de largo plazo (los 100 puntos) y sin dar claras señales de recuperación de la economía. Pese a ello, con la nueva información tanto el indicador coincidente como el adelantado registraron una mejoría respecto a lo publicado el mes precedente, destacó el Inegi.

El enfoque de “Ciclo de crecimiento” identifica a los ciclos económicos como las desviaciones de la economía respecto a su tendencia de largo plazo. Mientras el indicador coincidente va reduciendo su brecha con su tendencia de largo plazo, el adelantado la continúa ampliando, lo que significaría que las expectativas para la economía no son muy favorables.

El comportamiento del indicador coincidente en el pasado mes de febrero fue resultado de la evolución de los seis componentes cíclicos que lo integran. La mitad de ellos reportaron una mejoría, mientras que la otra mitad registraron un retroceso.

Entre los componentes del indicador coincidente que reportaron retrocesos en el segundo mes del año se encuentran las importaciones totales, bajando 0.12 puntos; la tasa de desocupación urbana, 0.07, y el indicador de la actividad industrial, 0.01.

Por el contrario, los que registraron una mejoría fueron el indicador global de la actividad económica (0.03 unidades), el índice de Ingresos por suministro de bienes y servicios al por menor (0.06) y el número de asegurados permanentes en IMSS (0.05).

De igual forma, la evolución del indicador adelantado en el mes de marzo fue consecuencia del desempeño de los componentes que lo conforman, donde tres reportaron mejora y tres tuvieron retrocesos. Las bajas fueron en el indicador de confianza empresarial, retrocediendo 0.03 unidades; el tipo de cambio real, 0.01, y el índice Standard & Poor’s 500, a la baja en 0.01.

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