El famoso “Diesel Gate” revive, se niega a pasar desapercibido y por el contrario, se empeña en marcar  la historia como uno de esos polémicos casos que cimbran su entorno mundial y, que en consecuencia, arrasa con los 15 mil empleados y sus respectivas familias, que laboran en la planta de VW en Puebla.

Todo comenzó como aquella famosa canción de los Be Gees “yo comencé la broma” para hacer creer que los vehículos a diesel de la firma alemana cumplían cabalmente con las normas internacionales de contaminación, pero aquella pequeña bolita de nieve creció y creció, hasta convertirse en una incontenible avalancha que hoy tiene a Volkswagen en medio de la peor crisis de su historia, pero quieres saber cómo afecta esto a las instalaciones y trabajadores de la compañía en el estado poblano…

Bueno, pues el gigante alemán fue severamente sacudido, y una muestra clara es su reciente reporte en el que reconoce que por primera vez, en los últimos 13 años, sus ventas mundiales en 2015 se vinieron abajo como consecuencia del Diesel Gate y la ralentización  de la economía china, y el golpe viene justo cuando se había posicionado como la número uno en ventas a  nivel mundial.

Por ese escándalo, la armadora alemana ceso a su director general Martin Winterkorn, le paso la estafeta a Matthias Mueller quien  reconoció que sus transacciones al cierre de  2015  cayeron 5% con 5.82 millones de ventas, donde  los principales reveses fueron recibidos justo en los dos mercados  más grandes del mundo, el estadounidense y   chino.

En territorio azteca. Para nadie es un secreto que México y específicamente Puebla, tiene una fuerte dependencia de lo que  Volkswagen genera y que cada revés que recibe la empresa impacta en la economía de sus trabajadores.

De hecho, el impacto ya se siente, no sólo por el cese de Winterkorn, sino porque en cuanto Estados Unidos recorta sus pedidos, automáticamente la planta disminuye sus exportaciones, sus ventas y su capacidad de producción, y es una lastima porque recientemente la empresa anunció que invertirá mil millones de pesos, para ampliar en 2016 la capacidad de producción de su planta poblana.

Volkswagen México se ha negado a hacer comentarios sobre este tema y se limita a decir que cualquier declaración oficial deberá llegar desde Wolfsburg, pero mientras el río siga haciendo ruido, se habla ya de que las contrataciones de personal están congeladas y todavía es una incógnita cómo le hará la compañía para retirar casi 11 millones de sus modelos diesel que fueron alterados en su sistemas de emisiones.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses