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Alvarado, Ver.— La Marina-Armada concluirá en 2020 la segunda línea de unidades aéreas no tripuladas para labores de vigilancia marítima y terrestre, construidas por ingenieros militares y civiles del Instituto de Investigación y Desarrollo Tecnólogico de la Armada de México (Inidetam), ubicado en Veracruz.

Como parte de su plan de desarrollo tecnológico, la dependencia creó en tres años (2015-2018) el Sistema de Patrullaje Autónomo y de Reconocimiento Táctico Aéreo (Spartaam), conformado por sus primeros tres drones de despegue de pista, utilizados para trabajos de inteligencia, búsqueda y rescate, en los que se invirtieron 28 millones de pesos.

Son empleados desde el año pasado en diferentes operaciones de la Armada de México y tienen capacidad para ocho horas de vuelo, 12 mil pies de altura y para volar a una distancia de 100 kilómetros.

Actualmente los ingenieros del Inidetam trabajan en el diseño y construcción del dron SANT de despegue y aterrizaje vertical, que estará listo en noviembre del próximo año, según los ingenieros encargados de electrónica, mecánica y diseño de las aeronaves no tripuladas.

La Marina-Armada de México cuenta con un total de 15 drones, de los cuales tres son de fabricación propia y 12, los Arcturus T-20, hechos en Estados Unidos.

“Creo que tenemos un sistema que se puede comparar con cualquiera a nivel nacional e internacional, tenemos capacidades muy buenas, pero desde nuestro punto de vista, [tenemos] la confiabilidad, porque el Spartaam ya tiene tiempo volando en operaciones reales y está funcionando”, comentó a EL UNIVERSAL el capitán de fragata Julián Ramos Granados, líder del proyecto.

“Lo podemos comparar con otros, pero la gran ventaja es que es nuestro. Tenemos la infraestructura para hacer los aviones, la experiencia y el personal para hacer todo el proceso.

“Nos pusimos como meta tener el sistema completamente autónomo en el que ya no se tiene ninguna interacción. La persona que lo opera, controla la aeronave desde la computadora y le dice: ‘Despega; aterriza; sube; baja y cambia de dirección de un lado hacia otro’, eso fue lo que nos propusimos y eso fue lo que logramos”, destacó.

“Dos proyectos han pasado por aquí: lo que llamamos el sistema Spartaam, ese proyecto ya concluyó y lo entregamos.

“La arquitectura que se planteó para este sistema era contar con una aeronave que pudiera transmitirnos video a una estación de control terreno”, añadió.

Sobre el dron SANT, en proceso de construcción, el capitán Ramos Granados explicó que el equipo de ingenieros llevan un avance de 17% en la construcción del dron, el cual tendrá las mismas características del Spartaam, pero su sistema de despegue será vertical.

Estará listo para pruebas en noviembre del próximo año, calculó el capitán de fragata.

El Instituto de Investigación y Desarrollo Tecnólogico de la Armada de México cuenta con un Centro de Capacitación y Adiestramiento de Sistemas Aéreos no Tripulados, el cual se encarga de capacitar y especializar a los operadores de los drones con los que cuenta la Marina.

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