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El PRD se declaró listo para ir a elección interna de dirigencias nacionales y estatales, previsiblemente el 29 de septiembre, con un padrón de medio millón de militantes, 5 millones menos que los perredistas afiliados hasta enero pasado.

Camerino Márquez Madrid, representante del PRD, estableció ante el Instituto Nacional Electoral (INE) que esa reducción se debe a que el perredismo ya dejó atrás la etapa de ser un partido de masas.

El padrón histórico, con el que el PRD surgió en 1989, llega incluso a 6 millones de militantes, aunque ante el INE acreditó 5.5 millones. Pero en las elecciones de 2018 votaron por ese partido sólo 3 millones de ciudadanos y ahora en su proceso de actualización de listado va por menos, pero “más comprometidos”.

“No tenemos preocupación de que no sea un padrón grande, porque de nada sirve si la vida militante no se refleja en el trabajo territorial”, expuso Márquez.

Agregó que en el PRD no van a excluir a nadie, ya que “hay una convocatoria pública y el ciudadano que pretenda seguir siendo del PRD refrendará su militancia y quien no, quedará en libertad”.

Con esto, el PRD busca abaratar sus procesos internos, pues está obligado a realizar elecciones en urnas con voto libre y secreto para elegir consejeros municipales, estatales y nacionales, además de congreso nacional.

“Buscamos que el costo de la elección interna sea menor a los 120 millones de pesos que se pagaron en la de 2014”, puntualizó.

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