Para organizaciones convocantes y organizadores de la concentración ciudadana de hoy en el Zócalo en defensa de la libertad y certeza del voto en México, este es el momento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Esperan que el Máximo Tribunal haga valer su carácter de guardián constitucional y eche abajo el plan B de la reforma electoral impulsado desde el Ejecutivo y su mayoría legislativa encabezada por Morena.

Hoy se espera que miles de ciudadanos salgan a las calles por segunda ocasión para manifestarse a favor de la defensa del Instituto Nacional Electoral (INE), y en rechazo de la reforma electoral que aún está en espera de que sea publicada completa en el Diario Oficial de la Federación.

A la convocatoria de UNID@S se han sumado más de 500 organizaciones civiles que protestarán en 102 ciudades de todo el país y el extranjero, contempladas hasta el registro del viernes, aunque se espera que la cifra pueda aumentar.

En esta ocasión, el lema de la manifestación será #MiVotoNoSeToca, para exigir que siga la ley electoral vigente en el próximo proceso electoral.

El llamado a la ciudadanía

Gustavo de Hoyos, fundador de la organización Sí por México, señaló en entrevista con EL UNIVERSAL que el objetivo de la concentración es la defensa de la democracia electoral mexicana, así como dar un voto de confianza a la Corte.

“Contrariamente a lo que se ha dicho en la propaganda oficial, no es una movilización en contra del Presidente, en contra de un partido político, sino que es en respaldo de la democracia”, dijo.

“También es un voto de confianza a la Suprema Corte de Justicia, que será la primera en dilucidar en su momento las impugnaciones que se han presentado ya y las que se presentarán en un futuro de las seis leyes que conforman el plan B”, subrayó.

Agregó que esta movilización tiene el propósito de enviar un mensaje claro, contundente e inequívoco a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en el sentido de que confiamos en que cumplirá con su papel de guardián de la Constitución que va a analizar las distintas impugnaciones que se han presentado.

Por su parte, Amado Avendaño, del Frente Cívico Nacional, confió en que la Suprema Corte, como primera instancia tome como una prioridad la suspensión del plan B, porque a pesar de que podría ser rechazado más adelante, si se implementa podría ocasionar un daño irreversible.

Indicó que esperan en que se aplique el criterio del ministro Pérez Dayán, que inaplicó parte del plan B en los procesos electorales de Coahuila y Estado de México.

El objetivo, dijo, es que la Corte considere la opinión de los ciudadanos en sus resoluciones sobre la reforma electoral.

Gustavo de Hoyos lamentó que desde la Presidencia se trate de “atemorizar”, señalar y estigmatizar a los ciudadanos que en su libertad de manifestación decidan participar en la concentración de este domingo.

Afirmó que los señalamientos desde Palacio Nacional van a “caer por su propio peso”, porque va aumentar el interés de la gente en asistir a la concentración. Sin embargo, indicó que su mensaje no estará dirigido a la Presidencia.

Amado Avendaño opinó que al gobierno le genera mucha preocupación que la ciudadanía salga a defender la democracia, y por eso se han incrementado los ataques contra la movilización. “Entre más insulta y denuesta la organización, genera mayor empatía (...), la gente se solidariza”.

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