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Las bancadas en el Senado coincidieron en que la Guardia Nacional opere con mando civil y que en la transición de cinco años, plazo en el que integrará militares, éstos se incorporen con licencia al cuerpo de seguridad pública.

Con esto, los acuerdos fueron cerrados por las ocho bancadas y el fin de semana se espera que el gobierno federal informe si está de acuerdo en esta regla que Morena asumió junto con el bloque opositor, integrado por el PAN, PRI y MC.

El coordinador de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, Ricardo Monreal Ávila, dijo que participa en el acuerdo de que en su primera etapa el mando de la Guardia Nacional se conforme con militares en situación de licencia.

“La Sedena y la Marina quieren conservar, aun cuando estén en la Guardia Nacional, la jerarquía sobre sus soldados. Y la Guardia Nacional no está en ese propósito”, afirmó Monreal.

El senador Damián Zepeda (PAN) confirmó que la revisión de las cuatro leyes concluyó, por lo que podrán lograr “muy buenas” iniciativas de las normas que van a regular de manera adecuada la Guardia Nacional, el Uso de la Fuerza, el Registro de Detenidos, y el Sistema de Seguridad Pública.

“Logramos entre todos fortalecer los documentos con las propuestas, así como con las recomendaciones de la ONU y las que han hecho públicas organizaciones de la sociedad civil. Usaremos el fin de semana para pulir redacciones e integrar los documentos finales. Esperemos que una vez elaborados y revisados finalmente, podamos lograr el consenso final la semana entrante”, mencionó el panista.

El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Manuel Añorve Baños (PRI), dijo que al cierre de los trabajos de revisión de la Ley Orgánica de la Guardia Nacional “hay una insistencia de que aceptemos que los militares no pidan licencia y eso contraviene la reforma constitucional”.

Añorve Baños subrayó que los votos del PRI estarán con una guardia civil que se ajuste a la reforma constitucional, incluidos sus artículos transitorios, de lo contrario, para sacar las cuatro leyes secundarias, en la Cámara Alta se tendría que aplicar mayoría.

Con todo, “una buena lectura para el gobierno federal: la Cámara de Diputados que entraría a revisar los proyectos de decretos respectivos, sería que el Senado aprobara por unanimidad, cómo se votó la reforma constitucional”.

El legislador dijo que se ha trabajado intensamente para dotar al presidente Andrés Manuel López Obrador de “un instrumento muy importante para la sociedad mexicana y para él”.

La secretaria de la Mesa Directiva, Verónica Camino Farjat (PVEM), indicó que en la construcción de los acuerdos sobre la legislación secundaria de la Guardia Nacional, los representantes de los grupos parlamentarios y del gobierno federal establecieron una dinámica “de ceder y conceder y ello derivó en nuevas formas de redacción que tendrán estas leyes”.

En el caso de la situación de los elementos que integrarán en su inicio a la Guardia Nacional, dijo Camino Farjat, se van a respetar los derechos que tiene cada uno en el servicio, con todas sus prestaciones.

Se ha dedicado tiempo a afinar conceptos, al considerarse, agregó la senadora por Yucatán, que “no había suficiente claridad y se ha buscado eso para que todos estemos de acuerdo y robustecer así el objetivo común”.

El coordinador del PRD, Miguel Ángel Mancera Espinosa, dijo que el próximo lunes habrá una reunión de revisión final de redacción de los proyectos, y en lo que respecta a las reglas para los mandos se indica que las Fuerzas Armadas no tienen mando en la Guardia Nacional, que es de fuero civil.

Mancera recordó que el decreto de la Guardia Nacional tiene un artículo transitorio en el que se manda que todos los elementos que sean transferidos por el Ejecutivo “conservarán sus antigüedades, derechos, prestaciones, y no se les afectará de ninguna manera”.

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