Gobernador de Veracruz defiende pesquisas por crimen de Ferral

Xalapa, Ver.— El gobernador de Veracruz, el morenista Cuitláhuac García Jiménez, defendió las investigaciones que realiza la Fiscalía General del Estado por el asesinato de la periodista María Elena Ferral, en abril de 2020.

El mandatario veracruzano aseguró que las órdenes de aprehensión solicitadas por la fiscalía y autorizadas por un juez, entre ellas contra un exalcalde por la autoría intelectual, desestiman cualquier pacto político para proteger a los responsables del crimen.

En su conferencia de prensa diaria García Jiménez destacó que el haber solicitado orden de aprehensión en contra de Basilio Picazo, exmunícipe e integrante de una familia de caciques del norte del estado de Veracruz, echa por tierra cualquier complicidad de funcionarios de la fiscalía, entre ellos, de la priista Marcela Aguilar Landeta.

“Lo peor hubiese sido que por la prominencia política que hay ahí se hubiera creado un pacto político, antes no se les tocaba ni con una notificación y eso echa por tierra alguna presunción”, opinó.

Reconoció el cacicazgo de la familia Picazo, pero insistió en que la Fiscalía General del Estado determinó que existe una presunción de responsabilidad en el homicidio por parte de uno de los integrantes del clan y hay seis detenidos como autores materiales.

Si bien dijo que la fiscal Verónica Hernández deberá reconvenir a sus fiscales, agentes o peritos, no podía dejar pasar el involucramiento de un exalcalde en el caso “y eso echa por tierra si existe alguna relación [de complicidad] de la fiscalía con ese personaje”.

En cuanto a la llegada de Benito Picazo como alcalde de Coyutla bajo las siglas de Movimiento Ciudadano (MC), expuso que nada puede hacer, pues el triunfo fue validado por un órgano electoral independiente.

Ayer, la Alianza de MediosMX —de la que forma parte EL UNIVERSAL— publicó un amplio reportaje en el que se expone, por primera vez, la trama que grupos políticos poderosos en el norte de Veracruz diseñaron y en la que estarían involucradas más de una decena de personas para asesinar a María Elena Ferral, una de las más importantes periodistas de la región, porque sus revelaciones hacían peligrar sus intereses políticos y económicos en esta región de la entidad.