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La muerte de Marisol, una mujer en situación de calle en Tacubaya, es la séptima registrada en la Ciudad de México entre el 31 de octubre y lo que va de noviembre, que se investiga como feminicidio.
La primera fue Ariadna Fernanda, cuyo cuerpo fue hallado en la carretera La Pera-Cuautla; Rautel la dejó ahí tras una fiesta.
El 2 de noviembre, Lidia Gabriela murió cuando se cayó del taxi donde iba porque el conductor cambió de carril. Ella iba pidiendo ayuda.
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El 3 de noviembre, María Elena, en la alcaldía Azcapotzalco, fue asesinada a golpes por un hombre que entró a su casa a robar.
Otro caso fue el de Margarita Cerezo, de 74 años, quien vivía con un hombre de 54, quien fue encontrada sin vida en su casa en Tlalpan.
El 14 de noviembre se conoció el caso de Asunción Guadalupe, quien murió a causa de un golpe en la cabeza que le dio su esposo.
Tres días más tarde, agentes de la fiscalía capitalina encontraron sepultado dentro de su casa, en la colonia Pueblo San Francisco Tecoxpa, de Milpa Alta, el cuerpo de Guadalupe, una mujer de 68 años de edad, madre de tres hijos, quienes denunciaron su desaparición. Al enterarse de que los hijos de Guadalupe habían hecho la denuncia, su esposo, Miguel Gamaliel, desapareció.
El caso más reciente fue el de Marisol, con el que se confirman al menos siete feminicidios durante noviembre.
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