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Los policías de este municipio “están desatados”, por lo que ediles abordaron el tema en el cabildo y pidieron freno a sus abusos y de personal de la Oficialía Calificadora del ayuntamiento, que se traduce en incremento en el número de recursos administrativos de inconformidad presentados por la ciudadanía.

“No nos bajan de rateros”, aseguró en sesión de cabildo el regidor Gustavo Felipe García Martínez, en alusión a las frecuentes denuncias ciudadanas sobre abusos y arbitrariedades de policías municipales.

El tema fue abordado en sesión de cabildo el pasado 19 de octubre, en la que la síndico Yuritzi Jhosselin López Oropeza dijo que “los recursos administrativos de inconformidad se han incrementado gravemente”.

La servidora pública afirmó que las quejas ciudadanas no son solamente contra policías municipales, sino contra comandantes de la corporación, oficiales calificadores y mediadores del ayuntamiento.

Aseguró que los recursos administrativos de inconformidad en la oficina de la sindicatura incrementaron notablemente en los últimos meses.

García Martínez reiteró: “No nos bajan de rateros. Es la peor administración que hemos hecho, porque los policías están desatados”.

La regidora María del Carmen Jiménez Rodríguez afirmó en la sesión que a pesar de las múltiples detenciones que realizan los policías municipales, no existen notificaciones de ingresos de recursos a la Tesorería municipal por concepto de las multas pagadas en la Oficialía Calificadora del ayuntamiento, la cual expide recibos sin validez oficial.

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