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De acuerdo con estadísticas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina, de enero a la fecha 21 policías preventivos han perdido la vida en servicio; seis de ellos fueron asesinados y su intervención se catalogó como acto heroico, al defender a la ciudadanía.
Además, otros 23 elementos de la dependencia resultaron lesionados por armas de fuego, también combatiendo a la delincuencia; mientras que otros 105 policías resultaron lesionados en accidentes por choque y 76 más fueron atropellados tratando de impedir que ciudadanos manejaran alcoholizados o, incluso, por aquellos que trataron de evitar un retén de revisión aleatoria.
En contra parte, cifras de la procuraduría local revelan que apenas cuatro presuntos delincuentes fueron abatidos en trabajos preventivos de la Secretaría de Seguridad Pública y ocho más resultaron lesionados con armas de fuego de la autoridad, después de que se enfrentaran a tiros con los uniformados al ser sorprendidos en flagrancia cometiendo algún delito, robo principalmente.
La cifra mortal y de lesionados de la corporación preventiva ha incrementado año con año, muestra de que la delincuencia le ha perdido el respeto al uniforme y que, ahora, cualquier individuo puede portar un arma de fuego que acciona al momento de robar o de sentirse intimidado por los policías.
De acuerdo con la estadística de los elementos caídos y lesionados de la SSP, de 2013 a la fecha, 122 elementos de las policías Preventiva, Auxiliar y Bancaria, así como de la Unidad de Servicios Escolares, han perdido la vida en su lugar de trabajo; de este universo, 82 de las víctimas fueron en servicio; 32, en actos heroicos, y ocho más se suicidaron.
El desglose de las víctimas detalla que 65 de los policías que han muerto pertenecían a la Policía Preventiva; 40, a la Policía Auxiliar; 16, a la Policía Bancaria, y uno sólo estaba adscrito a la Unidad Escolar.
De los 121 elementos que fueron abatidos, 100 se encontraban fuera de servicio, 21 estaban en su lugar de trabajo, 15 de éstos murieron en servicio y seis cayeron en eventos catalogados como actos heroicos.
Ayer el jefe de Gobierno, José Ramón Amieva Gálvez, aseguró que defenderá a los uniformados que hagan uso de la fuerza mortal en cumplimiento de su deber.