Tener un huerto en casa tiene muchos beneficios que van más allá del esparcimiento, la relajación o la terapia. Te hace comprender y valorar, cuánto tiempo se necesita para que la naturaleza pueda poner en tu mesa un kilo de jitomates, de calabazas o de limones; te hace apreciar el valor real de los alimentos y que tomes conciencia sobre el desperdicio y el esfuerzo que todos los días realizan las personas del campo para que te alimentes.
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La simple idea de tener un huerto en casa tal vez te despierte muchas interrogantes sobre el espacio, el tiempo y el presupuesto, y tienes razón, estos tres aspectos son fundamentales para que puedas llevar a cabo este proyecto, que además de útil, puede embellecer tu hogar. José Vázquez, agrónomo de Huerto al Natural, señala que el presupuesto y el espacio no representan un problema, porque tres macetas pueden conformar tu huerto, por lo que no se requiere de mucho espacio para colocarlas, lo que si tienes que valorar es el tiempo que le vas a dedicar porque no se trata solo de poner las semillas en la tierra y echarle agüita.
Lo complicado es definir los objetivos, un huerto en casa puede ser desde tres macetas con jitomate, lechuga y chile, hasta algo más complejo como un invernadero en la azotea con un sistema de riego por goteo”, advierte el experto. Añade que, como tal no hay una definición de un huerto, porque un huerto es un espacio en donde puedes tener un cultivo, no hay un mínimo ni un máximo, no hay cantidad de dinero mínima, ni máxima, todo depende del espacio y del tiempo que le quieras o le puedas dedicar, porque puedes sembrar cien lechugas, pero si no tienes tiempo para cuidarlas se van a morir.
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Vázquez aclara que, por cada metro cuadrado que le asignes al espacio de cultivo, le tienes que dedicar 40 minutos a la semana aproximadamente. Además de que tienes que tener ciertos conocimientos para saber si la semilla que vas a sembrar es para el clima donde vives, si estás en la temporada correcta y si colocaste tus macetas en el espacio indicado. “A partir del espacio y del tiempo puedes determinar que es lo que puedes sembrar. Puedes decir, voy a destinar tres metros cuadrados a mi huerto, entonces puedo meter dos jitomates en un metro cuadrado, dos chiles en otro metro y diez lechugas en el tercero, eso me va a representar por lo menos dos horas y media a la s emana”, indica Vázquez Señala que cuando comienzas a cultivar tus jitomates en casa y te tardas hasta ocho meses cultivando la planta para que te dé cuatro kilos, por supuesto que no vas a desperdiciar la comida y te la comerás toda. Estamos muy separados del campo y no tenemos ni idea de cuánto tiempo, cuánto esfuerzo, cuánta agua, cuánta dedicación hay que tener para que los alimentos lleguen a nuestra mesa, entonces es una parte de conciencia muy fuerte que se toma con un huerto en casa”, puntualiza Vázquez.
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Empecemos con hortalizas y quelites
Para iniciar tu huerto debes comenzar con hortalizas de corte bajo, la dieta prehispánica, comprendida por: acelgas, el quelite, las lechugas, las espinacas, los rábanos, que son de ciclos cortos, de tres a cuatro meses. Recomienda que antes de comenzar con tu proyecto, tomes alguna capacitación en un huerto cercano a tu casa, para que sepas qué cuidados debes tener y tengas éxito en esta actividad.
Por otra parte, Cecilia Armijo, Ingeniera agroecóloga del H uerto Heirloom , comenta que, si tú interés está en tener árboles frutales, puedes optar por un limón, una mandarina china, una granada roja, o el maracuyá que es una planta trepadora o tal vez algún pimiento. Armijo señala que para que estos árboles se puedan dar en casa, necesitas que el espacio donde vayas a poner tus macetas tenga por lo menos cuatro horas de luz solar directa, porque las plantas comestibles funcionan muy diferente a las plantas ornamentales, entonces necesitan mucha luz y de preferencia que sea un espacio ventilado.
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También hay que tener en cuenta que un árbol va a crecer lo mismo hacia arriba que hacia abajo. “Si plantas en una maceta mediana un arbolito frutal no va a crecer mucho, tal vez se quede chaparrito, si va a crecer y te puede dar frutos, pero no como si estuviera en tierra firme, sí se da; si quieres que crezca más, o quieres que te dé más frutos, necesitará de un mayor espacio. Yo, por lo menos, he sembrado arbolitos, en maceta de 50 centímetros de diámetro y 50 centímetros de profundidad para que crezcan bien y me den frutos”, comenta.
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Para comenzar con tu huerto puedes hacerlo con hierbas aromáticas, las cuales se dividen en leñosas y herbáceas. Las primeras son el romero, el tomillo, el orégano, que tienen tallo duro y son resistentes además de que tiene un ciclo de vida más largo, pueden durar hasta dos o tres años; mientras que las herbáceas, como el cilantro, el perejil, el epazote y la manzanilla, son de ciclo más corto, es decir que van a dar sus hojas, flores y semillas y van a morir en poco tiempo porque es su ciclo natural, pero puedes retrasar su muerte si las podas para que no aparezcan las flores.
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