Por mandato de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCyT), la naviera Impulsora Marítima de Quintana Roo y del Caribe, razón social de “Barcos Caribe”, suspendió operaciones en el cruce de Playa del Carmen a Cozumel y viceversa, debido a que presuntamente carece de seguros y certificados vigentes.

El anuncio fue hecho por la propia compañía, que informó que el viernes pasado la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR) realizó una inspección, en la cual se les otorgaron actas que demuestran que, actualmente, sus certificados y toda la documentación requerida está vigente y en regla.

De acuerdo con el oficio 7.2.201.-215/ 2018, fechado el 23 de febrero del año en curso, la Dirección General de Marina Mercante informó a César Celso González Hermosillo y Melgarejo y a Franco González Padrón, representantes legales de la naviera que, derivado de la revisión de la embarcación Caribe III, hay varios permisos vencidos.

“Se observa que se encuentran vencidos los certificados: Nacional de Seguridad, Nacional de Francobordo y Nacional de Seguridad Radioeléctrica; de igual forma no está vigente la póliza de seguro del viajero, vencida desde el 25 de enero de 2018”, se lee en el oficio.

En el documento, la Dirección General de Marina Mercante expone que luego de la explosión del 21 de febrero pasado, dentro de la embarcación Caribe, con número de matrícula 2304151221-1, al momento del desembarque de pasajeros provenientes de Cozumel, dos días después se reportó la presencia de una maleta abandonada en la terminal marítima de Navega, en Playa del Carmen, lo cual provocó el desalojo su desalojo, pues se presumió que era una bomba.

La autoridad añadió que era necesario contribuir a que se garanticen condiciones básicas de seguridad y a determinar la responsabilidad de ambos hechos.

La empresa exhibió también en acta circunstanciada de la inspección realizada por la Semar, a través de la Unidad de Capitanías de Puerto y Asuntos Marítimos, fechada el 23 de febrero, citando los nombres de dos inspectores navales y una representante de la Capitanía de Puerto y Asuntos Marítimos, realizaron una revisión ocular de la documentación del barco Caribe III.

Durante la diligencia estuvo presente Fabiola Carmona Diaz de León, quien se identificó como apoderada legal de la naviera y quien exhibió los documentos estatutarios de la embarcación, los cuales –se lee en el acta- se encontraban vigentes.

Ante la suspensión de operaciones, usuarios subieron a la plataforma digital change.org una petición para solicitar se reanude el servicio.

“Si Barcos Caribe se va de Cozumel, el duopolio nos van (sic) a volver a robar con sus excesivos precios y nos volveremos a quedar con menos gente que quiera conocer la isla por el costo excesivo de los boletos de barco. Recuerden gracias a quien se logró un precio digno”, se lee en la solicitud.

“Barcos Caribe” inició operaciones en febrero de 2015, por petición del entonces gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, bajo el argumento de establecer tarifas más competitivas frente a Ultramar y Barcos México, las otras nos navieras que dan el servicio y que en 2016 fueron multadas por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), por incurrir en prácticas presuntamente monopólicas.

En respuesta, ambas navieras promovieron un amparo en contra de la millonaria multa, alegando que la sanción beneficiaba a “Barcos Caribe”, vinculada con el ex gobernador, naviera investigada por la PGR y por el SAT, debido a su creación por medio de prestanombres y al ocultamiento en la compra de al menos cinco embarcaciones.

afcl

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses