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Cuernavaca.— El secuestro y homicidio de María Fernanda, hija del director de la Facultad de Derecho de la UAEM, Rubén Toledo Orihuela, provocó una protesta airada de la comunidad universitaria, abogados organizados y catedráticos de la máxima casa de estudios en Morelos, quienes exigieron justicia.

Ayer, la Fiscalía Antisecuestros informó sobre la aprehensión de dos presuntos responsables, entre ellos el primo de la víctima.

A Marifer se la llevaron de Cuernavaca la tarde del jueves 13 de diciembre, y su cuerpo sin vida fue localizado la tarde-noche del 24 en el municipio de Yautepec.

De acuerdo con la Fiscalía Antisecuestros, horas después de que la raptaron, su familia recibió llamadas telefónicas solicitando el pago de rescate a cambio de su libertad, por lo que el viernes 14 presentaron la denuncia.

Con las investigaciones lograron saber la identidad de los presuntos responsables, uno de ellos primo-hermano de la víctima, y con las pruebas obtuvieron de un juez las órdenes de aprehensión en contra de los presuntos responsables.

La fiscal Antisecuestros, Adriana Pineda, informó que desde el inicio de la investigación no se tuvieron indicios de que la víctima se encontrara con vida, por lo que se realizaron despliegues tácticos para localizarla y aprehender a los responsables.

Condenan crimen. La mañana del viernes, después de que se confirmó la identidad de la víctima, por redes sociales la comunidad universitaria expresó su condena por el crimen. Uno de ellos fue el catedrático de la UAEM Enrique Paredes Sotelo, quien en su cuenta de Twitter escribió: “Nos están matando a nuestr@s hij@s ¡Qué poca madre! No tenemos autoridad, carajo”.

También la bancada parlamentaria del PT en el Congreso de Morelos reprobó el asesinato y exigió a las autoridades esclarecer los hechos.

La Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) condenó y repudió “los hechos criminales que privaron de la vida a María Fernanda, estudiante de la Facultad de Medicina de la UAEM, e hija del doctor Rubén Toledo Orihuela, director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales”.

En un comunicado firmado por el rector, Gustavo Urquiza Beltrán, expresa a nombre de la comunidad universitaria su protesta y demandó a las autoridades que no quede impune este hecho.

“Solicitamos la más pronta, exhaustiva y plausible investigación de estos hechos oprobiosos que no sólo lastiman con profundo dolor a la familia Toledo Cervantes y a la comunidad universitaria, sino también a toda la sociedad morelense”, sostiene el rector universitario.

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