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En el año 2006 México vivió una fuerte polarización política y social.
En ese contexto, una parte importante del empresariado nacional se definió contra el candidato de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, quien fue presentado como una opción anti-empresarial.
Sin embargo, la experiencia de la gestión de AMLO al frente del Gobierno de la Ciudad de México indica otra cosa. De hecho, no tuvo ningún conflicto con ningún empresario. Los dos grandes conflictos que marcaron su administración fueron con el Poder Judicial de la Federación. Uno por el tema del Paraje San Juan, por el cual se pretendía obligar a la Ciudad a pagar mil 800 millones de pesos a un defraudador. Y otro por pretender construir un camino para comunicar a un hospital privado.
En cambio, con el sector privado, ese gobierno no tuvo conflicto alguno. Y no sólo eso, sino que construyó políticas que protegieron y fomentaron la inversión privada. Un ejemplo que hoy en día siguen mencionando muchos empresarios positivamente es el rescate del corredor Reforma y otro, el caso del Centro Histórico.
Los empresarios pudieron trabajar e invertir con libertad durante ese período de gobierno.
En la perspectiva de 2018, Morena, la fuerza política organizada por AMLO, ha relanzado una propuesta que incluye a los empresarios. En el equipo que elaborará el programa de gobierno se encuentran connotados hombres de negocios, como Alfonso Romo. En las recientes candidaturas de Morena se han incluido a figuras de la iniciativa privada, como Elvira Daniel para la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México y Armando Guadiana para el gobierno de Coahuila. En la dirigencia nacional se encuentra la ex presidenta de Canacintra Yeidckol Polenvsky, como secretaria general. Y en los primeros 50 puntos está la idea de contar con zonas francas de inversión privada con incentivos fiscales.
Por paradójico que parezca, Morena representa la mejor opción para los empresarios.
En los últimos gobiernos del PRI numerosas empresas privadas nacionales quebraron por las políticas económicas equivocadas. Durante los gobiernos del PAN la empresa privada fue sometida a un bombardeo de impuestos y afectada por la imagen que proyectó al mundo la mal llamada guerra contra el narco.
Morena ofrece hoy al empresariado mexicano:
1. Erradicar la extorsión, la mordida y el moche que tanto afecta a los negocios.
2. No aumentar los impuestos. Crear incentivos fiscales.
3. Energéticos y créditos baratos para las empresas.
4. Defender y diversificar los mercados externos para las exportaciones.
5. Promover la construcción de infraestructura, como carreteras, caminos, instalaciones hidráulicas y eléctricas, que benefician a la gente y facilitan el establecimiento de industrias.
6. Simplificación de trámites para la apertura y funcionamiento de negocios.
7. Combatir los contratos de protección, que perjudican a obreros y patrones por igual.
8. Fortalecer la seguridad pública y la protección a negocios con medidas sociales y con un eficaz funcionamiento del gabinete de seguridad.
9. Establecimiento de zonas francas para facilitar la inversión privada con incentivos fiscales y convergencia de inversión pública.
10. Conservar los equilibrios macroeconómicos.
Presidente de Morena en la Ciudad de México
