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Como sucede con cualquier actividad humana, el deporte también es fuente de inspiración artística. El movimiento, las exhibiciones de fuerza y la belleza de los atletas adquieren una nueva dimensión al ser vinculados al elemento estético. Esta relación viene de la antigua Grecia, cuando las artes y los juegos deportivos eran complementarios. El diseño de los estadios, por ejemplo, estaba a cargo de los más famosos arquitectos. Los mejores escultores los adornaban con estatuas. Oradores y poetas animaban las ceremonias de premiación.
Arte y deporte absorben al hombre por entero. Tienen en común el factor lúdico y la búsqueda de perfección. Ambos se subordinan a la energía, al movimiento y al anhelo de vencer obstáculos. El poeta mexicano Alfonso Reyes (1889- 1959) dijo: “El arte opera siempre como un juego que se da a sí mismo sus leyes, se pone sus obstáculos, para después irlos venciendo”.
El deporte es una actividad física y mental que se practica con fines recreativos y se basa en los valores de la existencia. Desde las artes plásticas, el pintor argentino Lucio Fontana (1899- 1968), al referirse a los fundamentos del arte dijo: “Nosotros postulamos una comprensión de los valores profundos de la existencia. Nos decidimos por la verdadera energía de la materia, su irreprimible necesidad de ser y de movimiento... Practicamos lo que el hombre tiene de natural y verdadero”.
Sin embargo, para el historiador Richard Mandell, “los artistas que optan por representar las competiciones y los juegos de atletismo en sus composiciones no son más que unos intelectuales que tratan de dar un bagaje ideológico a sus modelos. Los atletas de elite raras veces son artistas o intelectuales, algo sobre lo que, además, merece la pena meditar. A pesar de lo cual, abundan ejemplos que muestran la relación entre arte y deporte”.
En la era moderna, uno de los primeros en unir el deporte a las bellas artes fue el barón Pierre de Coubertin (1863- 1937), quien propuso engalanar los Juegos Olímpicos con canciones, eslogan, banderas, concursos literarios y desfiles de los atletas participantes.
Las artes plásticas, la música, la danza y la poesía, escogen en lo universal lo que juzgan apropiado para manifestar lo mejor del ser humano. Aplicadas al deporte, estas creaciones lo presentan como ideal de belleza y plenitud. El escritor británico John Ruskin (1819- 1900) dijo: “Cada vez que las facultades humanas alcanzan su plenitud, necesariamente se expresan mediante el arte”.
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