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Los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 dañaron 2 mil 340 inmuebles de valor histórico y cultural en 11 entidades: Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Puebla, Estado de México, Morelos, Guerrero, Tlaxcala, Hidalgo, Veracruz y Ciudad de México. Pero a esa cifra hoy se le aumentan 200 edificaciones que no habían sido registradas.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Arturo Balandrano, titular de la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, adscrita a la Secretaría de Cultura, habló por primera vez dentro de esta administración sobre el registro de más inmuebles dañados y explicó cómo ejercerán el presupuesto de este año y los avances de reconstrucción.

“Los 200 inmuebles están siendo valorados, aún puede haber cambios porque hay algunos que requieren restauraciones pero que no fueron afectados por los sismos. Dar una lista pudiera no ser precisa, pero sí puedo decir que las edificaciones están en los 11 estados”.

Presupuesto y acciones. El arquitecto Arturo Balandrano dejó la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH para encabezar la Dirección de Sitios y Monumentos, que para 2019 tiene asignados 967 millones 887 mil pesos, cuatro veces más que en 2018 (220 millones).

Balandrano, maestro en Ciencias en la Planificación Urbana y Regional por la Universidad Estatal de Florida y miembro del Colegio de Arquitectos, explicó que el presupuesto aumentó porque Sitios y Monumentos forma parte del Plan Nacional de Reconstrucción, a cargo de Román Meyer, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

El Plan de Reconstrucción tiene un presupuesto de 10 mil millones, de los cuales la mayor parte fue destinada a cuestiones prioritarias como viviendas, mientras que 800 millones fueron asignados a “acciones complementarias” en patrimonio cultural que ejerce la Dirección de Sitios y Monumentos, que en total, para este año tiene 967 mdp de presupuesto.

Para un primer proyecto, de tres que se tienen contemplados, se asignaron 800 mdp. Resultado de esta primera iniciativa surgieron 200 inmuebles que no fueron contabilizados por el INAH.

“Tanto el INAH como el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) son pilares de la política nacional de conservación, pero son instituciones normativas (autoriza o suspende obras e inicia denuncias penales contra quien dañe el patrimonio). Sitios y Monumentos es un órgano operativo con capacidades para desarrollar proyectos y obras para la conservación y mantenimiento de inmuebles históricos y artísticos por vía propia, pero principalmente por vía de la contratación de obras a prestadores de servicios especializados”.

El funcionario dijo que entre los 200 inmuebles está el Palacio Municipal de Juchitán (Oaxaca), del que colapsó una parte. También mencionó los palacios municipales de Jojutla y el de Tlayacapan, en Morelos.

“Los gobiernos de los estados no solicitaron dinero al Fondo de Desastres Naturales (Fonden) en su momento, no supieron cómo entrarle. Los 200 inmuebles no habían sido contabilizados por muchas razones, la tragedia nos tomó por sorpresa, el tamaño fue tan grande que en el INAH no nos pudimos dar cuenta hasta varias semanas después. También por las reglas del Fonden, que señala dos elementos importantes: Una vez que se declara la zona de desastre, tiene que haber una declaratoria por parte de Gobernación. El gobierno del estado que tiene una zona afectada por un siniestro le pide a la Secretaría de Gobernación que declare y publique esa declaratoria, sin ello no se puede acceder a recursos del Fonden” y nada de esto se hizo, explicó.

Una vez que el Fonden publica la declaratoria, los sectores afectados deben elaborar un expediente y subirlo a la plataforma digital del Fonden en los primeros 30 días para solicitar los recursos; sin embargo, ni gobiernos municipales ni estatales “subieron todo, porque no tenían la capacidad para hacerlo en 30 días”.

El segundo proyecto de Sitios y Monumentos tiene que ver con el mantenimiento de los espacios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. México tiene 36, de ellos, 10 son ciudades que reciben apoyo del gobierno federal a través de un subsidio. Este año, cada ciudad tendrá 10 millones de pesos para “acciones que conserven los valores patrimoniales de los centros históricos”.

El tercer programa consiste en recursos para el Fondo de Apoyo a Comunidades para Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (Foremoba), que impulsará proyectos de comunidades que buscan conservar y restaurar bienes. “Generalmente son templos, pero también hay plazas, fuentes, quioscos. En 2019 Foremoba tendrá 40 millones, 500 mil pesos por obra, de tal forma que se realizarán 80”.

Seguro y avances. En 2018, Diego Prieto, director del INAH, informó que por los sismos aumentó el costo de las pólizas, pasaron de 200 mdp a 2 mil millones anuales, por lo que inmuebles catalogados ya no tenían seguro en caso de sismos.

“Los seguros son un problema que no hemos podido resolver. Si hay un evento sísmico o volcánico, el Fonden responderá por los daños”, afirmó.

Sobre los avances, Balandrano dijo que para ejecutar obras se necesita dinero del sector público y seguir “al pie de la letra” la Ley de Obra Pública. Además adelantó que en breve será presentado un Comité, que “será instalado por Alejandra Frausto, secretaria de Cultura, y será la autoridad máxima que definirá a quién se le da dinero y con qué prioridad, para definir cuántos proyectos podemos apoyar hasta que se acaben los 800 mdp”.

“Los recursos están disponibles, no se perderán, pero requieren un proceso. Ayer tuvimos un reunión para definir cómo hacer la designación de los proyectos a empresas especializadas. Los inmuebles con daño menor serán reabiertos en próximos meses”.

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