Reinician rescate de templo en la Guerrero

Después de insistir a las autoridades culturales federales para que voltearan los ojos a la Parroquia de Nuestra Señora de Los Ángeles en la colonia Guerrero, cuya cúpula quedó destrozada por los sismos de septiembre, vecinos y trabajadores del templo reportan que las labores en el inmueble se han retomado. Nos cuentan que en mayo, funcionarios del INAH, entre ellos su director, Diego Prieto, visitaron el inmueble en la calle de Lerdo y se comprometieron a agilizar los trabajos de rescate. Semanas después, según reportan vecinos, especialistas en objetos religiosos acudieron al lugar para monitorear el estado de conservación de la imagen de Nuestra Señora de Los Ángeles, la patrona de la colonia, la cual ha permanecido en su altar, pero protegida para evitar deterioros. La maniobra de hace unas semanas, dicen, fue para verificar que la pieza esté bien. Por ahora, la que requiere atención urgente ahí es la cúpula fracturada.

Incompleto homenaje a Guillermina Bravo

“Improvisado, sin difusión, sin llamar a la gente”, fueron las palabras con las que el domingo, durante la función de El juego de los insectos, en los pasillos del teatro se hablaba del acto que hoy realizará el INBA para dar al Teatro de la Danza el nombre de la maestra Guillermina Bravo. No han sido las únicas críticas al acto protocolario. En redes sociales varias personas cuestionan el sentido del homenaje y demandan no dejar morir a los autores y sus obras en el olvido. Otros advierten que no hay ni un centavo para celebrarlo. Y tema aparte, algunos piden a la Coordinación Nacional de Danza del INBA que mejor manifieste su preocupación por la poca asistencia a dicho recinto. Por cierto, por años se ha advertido que el Centro Nacional de Danza Contemporánea en Querétaro, creado por la “Bruja de la Danza”, necesita más apoyo, que su archivo debe ser estudiado y catalagado, pues tiene tesoros como el telón de Rufino Tamayo.

Reubican a trabajadores del INAH ¿y los del INBA?

Trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) celebraron con pastel y café que finalmente fueron reubicados en una nueva sede, ubicada en la calle de Hamburgo, en pleno corazón de la Zona Rosa. Con el sismo del 19 de septiembre pasado, el edificio que rentaban por los rumbos de Chilpancingo, conocido como Conjunto Aristos, sufrió daños y todos los empleados fueron acomodados en diversos espacios como el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), en el Museo Nacional de Antropología, Fonoteca Nacional y el Castillo de Chapultepec. Los más de 850 empleados de diversas coordinaciones y direcciones comenzaron a despachar desde el día cero en esos diversos recintos, algo que no se puede decir de otros, ¿verdad INBA? ¿Ya habrán regresado todos al edificio de La Nacional, ubicado en Avenida Juárez?

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses