El Manchester City y el Liverpool suman más de 90 puntos y ninguno da su brazo a torcer en la lucha por una Premier League más disputada que nunca.

Los Reds solventaron su primera final por la vía rápida ante el descendido Huddersfield, cinco goles y tres puntos que dejaban toda la presión sobre los hombros de la escuadra dirigida por Pep Guardiola.

Los Skyblue sufrieron en el siempre complicado hogar del Burnley. No en vano, es el segundo triunfo de los mancunianos en sus últimas cuatro visitas a Turf Moor . Sin embargo la escuadra azul celeste mostró una sangre fría y un convencimiento a la hora de sacar adelante un partido tan incómodo, que le sigue manteniendo como favorita para levantar su segunda Premier League consecutiva.

En una liga tan competida y disputada, los detalles son los que marcan la diferencia. Una liga que se decide por milímetros, como los 1.13 milímetros que le faltaron al Liverpool para poder haber empatado aquel partido ante el City –el único que han perdido hasta el momento– y los que este pasado domingo en Turf Moor determinaron que el balón de Agüero era gol.

En el horizonte se divisan dos finales para ambos conjuntos, el City recibe esta semana a un Leicester que apura opciones de quedar séptimo y poder jugar competición europea y, cerrará el campeonato visitando al Brighton . Los Seagulls esperan tener resuelta su permanencia para esa fecha; en caso de no ser así, estaremos ante otro partido dramático, para unos y otros.

El Liverpool tiene ante sí un calendario ligeramente más favorable. Su próximo compromiso será visitar a un Newcastle que ha aprobado el curso con nota y terminará su campaña recibiendo a un Wolverhampton comandado por Raúl Jiménez . Los inquilinos de Molineux también pugnan por esa séptima posición.

No pensemos que sólo nos quedan dos semanas de espectáculo y de emoción, pensemos que aún nos quedan las dos semanas más intensas que se recuerdan en el futbol inglés. El clímax a una temporada memorable.

Disfrutemos y demos gracias a dos monstruos como Guardiola y Klopp por regalarnos un año espectacular. Ahora a ver quién lidia mejor con esa presión autoimpuesta por dos máquinas, casi perfectas de jugar al futbol . Pónganse cómodos y disfruten.

Cuando ninguno de los contendientes cede, los milímetros son la clave.

@AitorAlexandre

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses