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El presidente del Consejo de Administración de Grupo Financiero Banorte, Carlos Hank González, reconoce que la reducción del efectivo, además de ayudar a bancarizar al país, servirá como herramienta para disminuir la informalidad y la corrupción.
En entrevista con EL UNIVERSAL, dice que su infraestructura está lista para participar en la dispersión de programas sociales. En su opinión, el gobierno debe decidir si licita las tarjetas como transparencia.
El directivo, quien forma parte del consejo de asesores empresariales del presidente Andrés Manuel López Obrador, asegura que son pocos días de la nueva administración para marcar un cambio; sin embargo, opina que las decisiones recientes han enviado tranquilidad a los mercados.
Un jugador importante comenzó la dispersión de programas sociales, ¿cuándo veremos a Banorte?
¿Considera que debe haber licitación para garantizar transparencia en programas sociales?
—Eso lo define el gobierno federal, nosotros atenderemos a lo que ellos digan y encantados de participar.
¿Será Banorte jugador importante en esta estrategia?
—En Banorte estamos con toda la disposición de [aportar] toda nuestra infraestructura para apoyar ese plan tan importante para el Presidente.
Usted es uno de los asesores del Presidente, ¿cómo ha visto las primeras decisiones del gobierno?
—Lleva el gobierno mes y medio. Es un poco temprano para hacer algo de fondo, pero el Presidente, su gobierno y su equipo tienen claro que es lo que quieren. Tiene muy claro cuáles son las cosas que deben ir ejecutando y están tomando las decisiones, lo estamos viendo todos los días.
¿Descarta volatilidad como vimos con el aeropuerto?
—Al revés. [El gobierno] ha ido mandando señales de tranquilidad, muy sensatos, muy en concordia con lo que venía platicando y lo reflejan hoy los mercados financieros. Automáticamente si ven algún tipo de duda, de preocupación, lo reflejan de inmediato, pero también cuando ven certeza, cuando ven tranquilidad, y yo creo que el gobierno federal ha venido haciendo eso.
En específico para el sector, ¿cómo ven las medidas para bancarizar y disminuir el efectivo?
—Extraordinario, porque reducir el efectivo en lo que más va a ayudar es a bancarizar. El reto más importante que tiene la banca en México es tener un mayor nivel de bancarización, Hoy estamos cerca de 35% y aspiramos como gremio llegar a 50%. Este programa que anunció el Presidente impulsa la bancarización.
En un país con 90% de la población que usa efectivo, ¿cuándo podríamos ver una reducción?
—Podría ser algo muy rápido con las herramientas que nos da la tecnología. Es algo en lo que Banorte está muy entusiasmado, en volvernos el banco tecnológico de México. Con los códigos QR y el Cobro Digital se va a avanzar más rápido. Hoy puede ser alto el uso del efectivo, pero el uso de tecnología cada vez es más sencillo y ágil, y permite condiciones que vayan reduciendo en ese sentido.
¿Es una herramienta para reducir informalidad y corrupción?
—Totalmente. Es de las cosas que no sólo van a aumentar el nivel de bancarización, sino que van a ayudar en ese sentido.
Desde Banorte, ¿qué oportunidades de financiamiento ofrecen proyectos como el Tren Maya?
—Habrá que entender cómo viene y cuál es la idea final del gobierno federal pero son de las cosas en las que podemos participar. Conocemos el tipo de financiamiento que se debe de llevar a cabo para estructurar ese tipo de obras, con lo que Banorte será un jugador importante en ese sentido.
¿Puede cambiar la dinámica de crédito en estados y municipios con otro color de gobierno?
—Jamás hemos trabajado por colores. La verdad es que todos los estados tienen necesidades importantes en las cuales Banorte contribuirá en estructurar mejores condiciones de financiamiento para detonar la infraestructura. Con la fusión con [el banco] Interacciones no estamos hablando sólo de proyectos gigantescos como el Tren Maya, también estamos en obras como un sistema de alcantarillado, pavimentar una calle, hacer una escuela, un hospital o una carretera. Por supuesto que seguirá siendo una necesidad importante y Banorte tiene experiencia al respecto.
¿Inquietan en el plan de negocio la reducción de perspectivas de crecimiento para 2019?
— Es completamente normal. Si analizas, cada ciclo nuevo del gobierno federal, todos los primeros años el ritmo de crecimiento disminuye. Desde que llega nuevo gobierno o equipo, empieza a detonarse el gasto y la inversión. Es normal, no es sorpresa y estamos confiados en que el crecimiento estará en niveles que esperamos y seguirá creciendo a futuro.