La eficiencia recaudatoria y la mayor fiscalización del Servicio de Administración Tributaria (SAT) permitieron al gobierno de Andrés Manuel López Obrador contar con casi 900 mil millones de pesos entre 2020 y hasta septiembre de este año.
Ambas estrategias significaron uno de los mayores músculos del brazo recaudador del gobierno federal en tiempos extraordinarios, considerando que en ese lapso se atravesó la crisis generada por la pandemia del Covid-19 y después el periodo de recuperación económica.
La fuerza recaudatoria de esta modalidad es tal que en esos casi dos años se han generado recursos que pueden financiar cuatro veces lo que se pide de presupuesto para el programa de Pensión para Adultos Mayores en 2022, que son 238 mil millones de pesos, o 14 veces lo que se solicita para el Tren Maya el próximo año: 63 mil 232 millones.
Músculo fiscal
De acuerdo con las cifras del SAT, el mayor monto obtenido por medio de estas dos estrategias fue por la vía de la fiscalización, de la que se registraron casi 683 mil millones de pesos, mientras que la eficiencia dejó 205 mil 935 millones.
Del gran total, los grandes contribuyentes pagaron 359 mil 741 millones de pesos, derivados de actos de fiscalización, es decir, sin judicialización.
A través de revisiones en el sector de comercio exterior, que incluye la importación de hidrocarburos, ingresaron a las arcas del gobierno 98 mil 188 millones de pesos, por las acciones del brazo fiscal de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
El SAT reportó que de los 888 mil 850 millones de pesos generados por eficiencia recaudatoria y cobranza, sin tener de por medio un juicio, 512 mil 421 millones se saldaron en efectivo. Y el resto, 376 mil 430 millones de pesos, fue una recaudación virtual, es decir, una cantidad que el contribuyente no podrá utilizar para futuros pagos de impuestos, como por ejemplo pedir devolución o realizar compensaciones como tampoco para aplicar pérdidas fiscales.
Asignatura pendiente
Al presentar los resultados preliminares del periodo enero-septiembre de 2021, el órgano recaudador de impuestos reconoció que la asignatura pendiente aún es el fortalecimiento de las contribuciones por comercio exterior, ya que disminuyeron 6.5% en términos reales respecto a enero-septiembre de 2019, es decir, antes de la pandemia de Covid-19.
Aunque comparado contra igual periodo de 2020 hubo un alza en términos absolutos de 72 mil 400 millones de pesos.
En las aduanas
De los ingresos tributarios por comercio exterior que se reportaron en las 49 aduanas del país, el Impuesto al Valor Aagregado (IVA) se constituyó como el gravamen que más aportó.
No obstante, en las 17 aduanas marítimas que operan en los distintos puertos del país se recaudó el mayor monto generado por el pago del IVA.
En las aduanas portuarias ingresaron por contribuciones 371 mil 540 millones de pesos, de los cuales, 245 mil 98 millones fueron por el IVA, un aumento de 6.7% en términos reales, sobre todo por petróleo; la que más aportó fue la de Veracruz, con 58 mil 422 millones de pesos.
También destacan las fronterizas por la variación que se logró en el total de recaudación de impuestos por comercio exterior, con 17.2% en términos reales.
Pero la aduana de Nuevo Laredo se mantiene a la cabeza de todas en cuanto a recaudación del IVA, con 94 mil 731 millones de pesos de enero a septiembre del presente año. En segundo lugar quedó la de Veracruz, con ingresos por 58 mil 422 millones.
Las 11 aduanas interiores recaudaron 104 mil 467 millones de pesos, un incremento de 11.1%, de las cuales la del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México correspondieron 41 mil 907 millones.
Por el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) petroleros, las reinas son las aduanas marítimas, con una recaudación de 89 mil 685 millones de pesos.
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