El conflicto en el Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos número 5 “Benito Juárez” escaló hoy después de que la Dirección General del Instituto Politécnico Nacional (IPN) anunció que amplió el número de estudiantes denunciados por los delitos de motín y despojo, derivado del paro que mantienen desde el viernes pasado.

Ricardo Padilla, estudiante de quinto semestre de la “voca” 5 dijo en entrevista telefónica que los jóvenes consideran que las denuncias interpuestas por las autoridades politécnicas sólo tienen el objetivo de intimidar y amedrentar a los estudiantes que están protestando.

“Pedir más seguridad es justo, mejor atención médica es justo, que funcionen los laboratorios es justo. La Dirección General sólo está buscando amedrentar y reprimir a los estudiantes”, señaló.

“La asamblea decidió que vamos a continuar con el movimiento hasta que salga el director interino del plantel”.

El Politécnico confirmó por la tarde que desde el 2 de octubre el abogado general presentó una denuncia penal ante la Procuraduría General de la República por los delitos de motín y despojo, después de que un grupo “de aproximadamente 30 personas entre alumnos, personal de apoyo y de asistencia a la educación y otros más ajenos al plantel tienen tomadas las instalaciones desde el sábado 1 de octubre”, señala información emitida por el IPN.

Ayer la situación se tensó de nuevo después de que llegaron a las instalaciones de la vocacional 5, un grupo de trabajadores que intentó remover las barricadas colocadas por los jóvenes sobre la calle Enrico Martínez y Emilio Dondé (detrás de la plaza de la Ciudadela) para impedir el acceso a la escuela.

Los jóvenes, cubiertos de la cara, recibieron a los trabajadores e impidieron que se llevara a cabo el retiro de las barricadas elaboradas con mesabancos, botes de basura y señalamientos de tránsito; posteriormente las volvieron a colocar.

jram/ml

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