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Este mediodía, el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade, advirtió que México no podrá culminar su proceso de modernización si no abate el flagelo de la pobreza en la que aún se encuentran muchos de los mexicanos.

Como único orador del evento por el 250 aniversario del natalicio de José María Morelos -que encabezó el presidente Enrique Peña Nieto en el Castillo de Chapultepec- dijo que es imperativo romper inercias y esfuerzos aislados en el combate a la pobreza.

Tras recordar el pensamiento social de Morelos y advertir que la visión del “Generalísimo” tiene ecos en el México de hoy. El funcionario federal atajó:

"No hay futuro en la desigualdad ni en prosperidad sin el ejercicio pleno de los derechos. México no podrá culminar su proceso de modernización si no abate el flagelo de la pobreza en la que aún se encuentran muchos de nuestros compatriotas", dijo.

Meade -quien no suspendió su discurso cuando se activó la alerta sísmica de la Ciudad de México- señaló que el orden legal le confiere a cada mexicano un conjunto de derechos fundamentales cuyo cumplimiento y ejercicio pleno es necesario para gozar de una verdadera ciudadanía.

“De ahí la responsabilidad del Estado hacia quienes se encuentran en desventaja a fin de establecer las condiciones que les permitan desarrollarse a plenitud y valerse por sí mismo a partir de su propi esfuerzo, trabajo y dignidad”, indicó.

Al presidente Peña Nieto lo acompañaron en este acto los secretarios de Gobernación, de la Defensa Nacional, de Marina-Armada de México, y de Comunicaciones y Transportes, así como el comisionado nacional de seguridad, y el jefe de la oficina de la Presidencia.

En su mensaje el titular de la Sedesol manifestó que el presidente Peña ha trazado la ruta para generar condiciones a fin de combatir con decisión la pobreza entendida –argumentó- no como un solo fenómeno sino como un conjunto de carencias  relacionadas unas con otras.

Asentó que la estrategia del gobierno federal en la materia tiene como finalidad erradicar de manera progresiva las carencias y, en consecuencia, asegurar el acceso pleno a los derechos que la Constitución y las leyes que nos rigen confieren a los mexicanos.

Subrayó que el objetivo de la política social es empoderar a cada uno de los mexicanos para que ejerzan a plenitud sus derechos y puedan asumir las riendas de sus propios destinos con autonomía y dignidad.

“En la búsqueda de ese México más incluyente, de derechos plenos es imperativo romper inercias, la inercia de los esfuerzos aislados para emprender en cambio una labor coordinada, tal como el Presidente  nos ha instruido realizar a través de la Cruzada Nacional contra el Hambre”, indicó.

Asentó que los ideales por los que lucharon Morelos y sus seguidores iban más allá del establecimiento de una nación independiente pues incluían, como parte esencial de su programa, el reconocimiento de derechos fundamentales y el establecimiento de las condiciones que hicieran posible ejercerlos a cabalidad.

“Morelos es y debe ser, para todos y cada uno de nosotros,  un referente del amor que le profesamos a México, nuestra casa y proyecto común, la nación que heredamos de nuestros antepasados y que queremos sea mejor, más justa y más incluyentes para el bien de nuestros hijos y futuras generaciones”, indicó.

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