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El presidente nacional sustituto del PRI, Enrique Ochoa Reza, acumula ya cinco impugnaciones en contra de su nombramiento al frente del tricolor.
Las cinco impugnaciones son por considerar que Ochoa no cumple con 10 años de militancia que los estatutos establecen como requisito para acceder a la presidencia nacional de este partido.
Los inconformes advierten que el ex director de la Comisión Federal de Electricidad violó la convocatoria que lanzó el PRI el pasado 8 de julio para elegir a su nuevo dirigente. En ella se expuso que era necesario contar con 10 años de militancia probados en el partido para acceder al cargo.
Ramiro de la Rosa Bejarano, priísta de Quintana Roo, presentó ayer ante la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del Revolucionario Institucional un recurso para juicio de protección de los derechos partidarios del militante.
De la Rosa Bejarano alega que Ochoa Reza hizo público en octubre de 2010, durante su comparecencia ante la Comisión de Gobernación en la Cámara de Diputados —cuando buscó ser consejero electoral— no ser militante del PRI desde hacía ya algunos años.
“Así las cosas, arribamos a la conclusión de que Enrique Ochoa Reza sistemáticamente no es del PRI desde el año 2003, cuando renunció. En el año 2010 se deslindó del partido que pretende dirigir, por lo que tampoco cumple el siguiente requisito: 10 años de militancia para los dirigentes del Comité Ejecutivo Nacional. No existe documento alguno del PRI que conste que Ochoa Reza lo cumpla. Además, él mismo expresó que renunció al PRI en 2003; en 2010 se deslindó del partido, por lo que se vuelve inelegible”, señaló.
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