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Un hombre abatido a tiros ayer por soldados franceses en el aeropuerto de París Orly gritó que estaba allí para “morir por Alá” e intento arrebatarle a una soldado un rifle de asalto, en un aparente intento de disparar contra los pasajeros, dijo un fiscal.
El último de una serie de ataques ocurridos en Francia obligó a evacuar el segundo aeropuerto más transitado del país europeo y volvió a situar la seguridad en el centro de atención de la campaña presidencial francesa.
El atacante, identificado como Ziyed Ben Belgacem, llegó al aeropuerto de Orly en la mañana del sábado, tiró una mochila que contenía una lata de gasolina y agarró a una militar de la fuerza aérea que formaba parte de una patrulla, dijo el fiscal de París, Francois Molins.
Usando a la soldado como escudo, apuntó su pistola de aire comprimido a su cabeza y gritó a los otros soldados que estaban con ella: “Bajen sus pistolas. Pongan sus manos en la cabeza. Estoy aquí para morir por Alá. En cualquier caso habrá muertes”. Los militares abatieron entonces a tiros a Belgacem.
Molins dijo que el atacante, quien intentó hacerse con el rifle de asalto Famas de la soldado, parecía dispuesto a perpetrar un grave ataque. “Uno siente que estaba decidido a llegar hasta el final”, comentó a la prensa.
La policía encontró en su cuerpo un ejemplar del Corán y 750 euros en efectivo. En su casa hallaron varios gramos de cocaína, un machete y algunas monedas extranjeras, indicó Molins.
El objetivo elegido por Belgacem y las evidencias de que estaba radicalizado justifican la puesta en marcha de una investigación terrorista, indicó Molins, quien agregó que el padre, el hermano y un primo de Belgacem se encuentran bajo custodia policial.
Hora y media antes de los hechos, durante un control de carretera al norte de París, el mismo hombre disparó a unos agentes de policías con la pistola de aire comprimido, hiriendo levemente a uno de ellos en la cabeza. Poco después robó un coche a unos 30 kilómetros de ahí, antes de dirigirse al cercano aeropuerto de Orly.
Belgacem tenía antecedentes penales por delitos comunes.
El tráfico aéreo fue interrumpido durante la mañana en Orly y casi 3 mil personas fueron evacuadas de la terminal sur. Una operación de desminado comprobó la ausencia de explosivos.
El presidente francés, François Hollande, elogió “la valentía” de los policías y militares frente a un “individuo particularmente peligroso y recalcó la “determinación del Estado para actuar sin descanso contra el terrorismo”.
Ayer se informó que el joven de 17 años que el jueves atacó un instituto en Grasse, en el sureste francés, quería matar a entre ocho y 14 compañeros con los que estaba resentido. Hirió a cinco personas levemente.
