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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
Un inmueble catalogado como histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la delegación Cuauhtémoc es objeto de disputa entre dos grupos de paracaidistas.
El primero dice ostentar la propiedad del predio, sin tener documento alguno que así lo acredite, y el otro busca apoderarse del sitio para dar cabida a la expropiación del lugar.
La delegación Cuauhtémoc está enterada de esta situación, sin querer intervenir en el asunto, pese a que los paracaidistas amenazan con llegar hasta las últimas consecuencias como incendiar la entrada del edificio para evitar el acceso de las personas que buscan demoler el inmueble si la autoridad no interviene.
Así lo adelantó Josefina Díaz de la Cruz, habitante por más de 40 años del predio ubicado en la calle Abraham González número 29, colonia Juárez.
Díaz de la Cruz denunció que, desde hace un mes, alrededor de 25 hombres han intentado apoderarse del predio, incluso algunos ya están trabajando en el lugar tirando paredes.
El viernes pasado la habitante, quien aseguró no pertenecer a una organización aunque reconoció estar en contacto con la Asamblea de Barrios, pidió la intervención inmediata de las autoridades.
Señaló que ya acudieron al Ministerio Público a interponer una denuncia en la Agencia 5 de Santa María la Ribera, pero que tampoco les hicieron caso.
“Empezaron a meter colchones, a sacar cosas, a tirar las paredes, pero el viernes llegó una señora apantallándonos con tipos de seguridad gordotes, altos, la que hablaba era ella, que suponemos es una líder de una organización, pero no dieron nombres”, señaló Josefina.
Actualmente, alrededor de cuatro familias que conforman 30 integrantes, ocupan el inmueble ubicado en la colonia Juárez.
Se trata de un inmueble catalogado por el INAH que consta de tres niveles con una antigüedad de construcción de más de 100 años.
Documentos en poder de Josefina Díaz señalan que después de realizar una evaluación de riesgo al inmueble, solicitada por la misma inquilina, se determinó que presenta un severo asentamiento diferencial hacia el lado sur.
No obstante, el documento dirigido a Díaz de la Cruz y firmado por Ricardo Castillo, subdirector de Protección Civil de la delegación Cuauhtémoc, aclara que esta evaluación no tiene el carácter de dictamen debido a que la subdirección no cuenta con el personal autorizado para llevar a cabo dictámenes estructurales.
“No nos pueden sacar porque hasta el momento no han demostrado una supuesta adjudicación de herencia y hasta que no demuestren que efectivamente los tienen, no nos vamos a ir”, advierte.
Comenta que hace tiempo iniciaron un juicio de prescripción positiva, el cual está en etapa de sentencia, además de que se han mandado hacer edictos para buscar a Jorge Asaf Bala, propietario del predio.
“Mi madre tiene viviendo aquí desde que tenía 28 años de edad, era amiga de don Jorge, quien le encargó que cuidara este sitio y ahora nos dicen que ya se murió pero no demuestran nada con papeles oficiales”.
Cuenta que la semana pasada acudió Francisco Javier Sánchez Hernández, supuesto representante legal de Asaf Bala, para pedir que desalojaran el lugar ya que hay un supuesto heredero Eduardo Asaf Dagnino que ni siquiera aparece en el registro público como pariente.