Al sur de la ciudad, en lo que fueran los terrenos ejidales del pueblo de Santa Úrsula, entonces cubiertos de roca volcánica, en 1962 inició la construcción del Estadio Azteca, bajo el diseño del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez.

Tras haber concluido su edificación en tiempo récord, el 'Coloso de Santa Úrsula' fue inaugurado el 29 de mayo de 1966 con un partido entre el Club América de México y el Torino de Italia, que terminó con un empate a dos.

Con una capacidad para 105 mil espectadores,  este imponente inmueble se convirtió en el estadio de futbol más grande de México y de Latinoamérica.

A lo largo de su historia, este espacio ha vivido momentos de gloria deportiva como las Copas Mundiales de 1970 y 1986, y el Campeonato Mundial de Futbol Femenil de 1971, entre muchos otros eventos deportivos más.

Una construcción eterna, indestructible, pero que tiene el reto de adaptarse a las exigencias del Siglo XXI, según sus creadores.

El azteca enfrenta un proceso de remodelación para satisfacer las necesidades actuales del espectador futbolero y de la NFL, que volverá con un partido de temporada regular en noviembre, luego de 11 años de ausencia.

Se reemplazarán las clásicas butacas con suites ejecutivas, palcos plus, con capacidad para cuatro u ocho personas, adaptadas con salas VIP. Los baños y los vestidores también serán remozados. Con las modificaciones el aforo quedará en 87 mil asistentes.
Las adecuaciones para los medios de comunicación nacionales e internacionales con conectividad a internet estable es otro de los retos que enfrenta la administración del emblemático inmueble de Tlalpan.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses