En la actual legislatura de la Cámara de Diputados Federal, la Comisión de Radio y Televisión tiene una propuesta para ampliar su siglado e incluir en su nombre y campo de actuación a los medios impresos y digitales, es decir para quedar como Comisión de Radio, Televisión, Medios Impresos y Digitales; porque hoy más que nunca, se requiere del fortalecimiento de los instrumentos que promueven la democracia y la libertad de expresión.

Si bien es cierto los medios de difusión masiva, como la televisión y la radio, se han consolidado de manera efectiva a lo largo de la historia de la comunicación; en esta era digital es fundamental incluir como un instrumento de difusión masiva a los medios digitales, que día a día llegan a millones de usuarios.

¿Por qué los medios impresos?

Hay casos emblemáticos como el de The New York Times, del que su propio director general, Arthur Sulzberger, anunció hace ocho años que dejaría de circular en su versión de papel; sin embargo, ha quedado claro que la lectura tradicional como son los medios impresos y la literatura en su diversidad, se saborean de forma especial con la experiencia física de libros o periódicos en su caso.

Es fundamental dar la relevancia necesaria a cualquier instrumento de comunicación que consolide la exposición de ideas, que fomente la pluralidad, que genere condiciones para establecer criterios y, sobre todo, fomente el libre ejercicio de los derechos fundamentales.

Ley de Remuneraciones

La controversia alcanzada por la propuesta de que nadie deba ganar más que el presidente de la República en el gobierno no solo es justa, sino elemental; por el simple hecho de que el cargo que ocupa el Ejecutivo federal, es el más elevado que existe.

Sin embargo, es importante reflexionar que la ideología es la elección de un estilo o forma de vida, la ideología no se sustenta por la remuneración que se obtiene en el cargo público, la ideología es vivir en la medianía como lo ha señalado el presidente de la República.

Entonces, lo importante es que todo aquel que quiera formar parte del gobierno de la República debe asumir que su vida y la de su familia se habrá de constreñir a vivir en la medianía, sin importar el ingreso que por su actividad y talento se obtenga o se haya obtenido.

Por ello, es importante destacar que, por supuesto hay opciones de obtener mejores ingresos, sin embargo no será a través del servicio público.

Pero también resulta importante, en aras de la legalidad y de la forma en que se conforma la República, aceptar a los otros poderes, Legislativo y Judicial, como entes independientes que deciden sus condiciones administrativas, en el ejercicio de su propia autonomía.

En el caso de la Cámara de Diputados ya se han realizado los ajustes, que a juicio de esa soberanía son los necesarios para aproximarse al ejemplo que, de manera clara y contundente, ha impuesto el Ejecutivo federal.

Diputado federal

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