Antes de dormir el enemigo podría estar en la cama y al levantarse en los zapatos, de acuerdo a la incidencia de picaduras de alacrán en los hogares.
"Al acostarme me picó, fue cuando me puse la chancla, estaba en mi zapato, al ponerme la playera sentí el piquete", dicen con frecuencia las personas que acuden a los servicios de urgencias hospitalarias y Centros de Salud.
El Sistema Único de Vigilancia Epidemiológica (SUAVE) reportó que del 1 de enero al 25 de marzo de 2017 en Guanajuato, se han registrado 7 mil 441 casos de intoxicaciones por picaduras de alacranes en los 46 municipios del estado.
En la temporada de calor se registra la cifra más elevada de víctimas. En la Cruz Roja han llegado a atender hasta 80 pacientes en un día.
La Secretaría de Salud del Estado informó que a nivel estatal León ocupa el primer lugar en picaduras de arácnidos, seguido de Irapuato y Celaya.
En la entidad existen varias especies de alacranes: los Centuriode infamatus, cuya picadura es venenosa; además de los Centuroide ornatus y veajovis, cuya agresión es inofensiva, expuso.
La dependencia pidió a la población tomar medidas de cuidado para evitar las picaduras de arácnidos en casa.
Las molestias iniciales que puede presentar la persona intoxicada por picadura son: dolor local, hormigueo, entumecimiento, comezón en la nariz, lagrimeo, salivación y sudoración. En casos de gravedad se presenta: sensación de un cuerpo extraño en la garganta, pérdida de la conciencia y convulsiones.
La Secretaría de Salud explicó que cuando la persona presente alguno de estos síntomas debe evitar tomar remedios caseros y automedicarse.
Hay que acudir de manera inmediata a la unidad de salud más cercana, donde recibirá atención adecuada de manera gratuita.
cfe
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