A un mes y dos días de la visita del Papa a Chiapas, cámaras, asociaciones empresariales y prestadores de servicios turísticas hicieron un “enérgico llamado” al gobierno para garantizar la seguridad, la estancia y el libre tránsito en el territorio estatal.

Luego de los hechos violentos en el municipio de Oxchuc donde grupos inconformes incendiaron viviendas, vehículos, retuvieron personas y un autobús con turistas extranjeros, los representantes de gremios, asociaciones y organizaciones de prestadores de servicios, advirtieron que el llamado al gobierno es a “tratar de evitar que las cosas sigan subiendo de tono y ya sea algo irreparable”.

Raúl Alberto Ramos Ascensio, presidente de la Cámara de Comercio y Servicios Turísticos de San Cristóbal de las Casas alertó de “focos rojos; hay muchos focos rojos y debemos atender las circunstancias de la manera adecuada y más civilizada, que nos garanticen la paz y la tranquilidad a todos”, enfatizó.

Ante esa realidad, el empresario dijo que la convocatoria a la seguridad y al orden social involucra no sólo a las autoridades de gobierno, sino también a los grupos sociales, a que hagan lo que les corresponde para sentarse y negociar; "a golpes nada se resuelve”, sostuvo.

En su próxima visita al país, el Sumo Pontífice llegará a San Cristóbal de las Casas y Tuxtla Gutiérrez, el 15 de febrero, donde ofrecerá una homilía y compartirá un mensaje a la familia.

Para el encuentro de fe y devoción en Chiapas se espera la llegada de católicos y visitantes del país, de países centroamericanos así como de Europa, que incluye a representantes de medios de comunicación e integrantes de la comitiva del Papa.

Este martes, tras los hechos de Oxchuc y en medio de los preparativos de la visita papal, representantes de 40 gremios, asociaciones y organizaciones de sectores productivos demandaron al gobierno garantizar el Estado de Derecho, el libre tránsito en todas las carreteras, vías de acceso y espacios públicos de Chiapas.

De igual manera, que se garantice y proteja las inversiones el patrimonio y fuentes de empleo, así como se reparen los daños de todas las pérdidas materiales generadas.

Los representantes de los sectores económicos acusaron que el deterioro social ha derivado en “graves problemas” de seguridad que se han intensificado en todo el territorio estatal, los cuales han provocado “severos daños”.

Enlistaron más de 300 bloqueos registrados desde 2013, con un “drástico y preocupante” incremento el año pasado, asaltos a mano armada a transportistas, ciudadanos y turistas de diferentes nacionalidades.

La violencia en Chiapas ha dejado también “lamentables pérdidas humanas”, advertencias internacionales de visitantes extranjeros sobre el riesgo de visitar Chiapas, despojo y robo de mercancías, secuestro e incendio de unidades de transporte particulares y empresariales y quebranto del Estado de Derecho, puntualizaron.

spb

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