Más Información
janet.merida@eluniversal.com.mx
Para Tulipa Ruiz, es curioso que mientras en Brasil o México (y seguramente muchos países latinoamericanos) la música tradicional tiene poca difusión y escasos espacios en medios de comunicación y escenarios, esa identidad es su principal atractivo en el extranjero.
La cantante brasileña (ganadora del Grammy Latino 2015) dice que lo ha visto en sus constantes invitaciones a Europa, donde quieren de ellos lo que los hace brasileños.
“Es impresionante venir a México y poder ver un país de tercer mundo como Brasil que también niega su propia identidad, es triste pero es interesante ver un lugar semejante al mío. Cuando voy a Europa es muy diferente, es muy diferente ir a un país colonizador pero también es interesante mirar a mi hermano (México) colonizado como yo.
“El mundo quiere nuestra identidad, pero ellos vinieron acá y nos la quitaron, quieren que volvamos con lo puro que tenemos pero ellos sacaron eso”, dijo a EL UNIVERSAL.
Esta es la segunda vez que Tulipa visita México, la primera en mayo pasado. El próximo 2 de diciembre presentará la música de su último material discográfico Danzê en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, un disco que ella misma quería que ofreciera la experiencia de un libro en su diseño, papel y tipografía.
Pese a que dice que llegó un poco tarde a la música (a los 30 años, en 2010), Ruiz suma ya tres discos que han significado toda una evolución musical.
Para la artista, el primero (Efêmera) es como un plano a detalle, un close up en el que habla de cosas como llegar tarde a algún lugar. El segundo (Tudo tanto) es un plano americano de su película sonora y el tercero una vista panorámica en donde habla, por ejemplo, de la muerte.
El tema que más suena en su cabeza (de este disco), dice, es “Algo Maior”, que identifica la época política que vivimos varios países y que es también un mantra de cambio.
“Está por surgir algo que derrocará las cosas que se obstinan en el estancamiento” dice en portugués.
Esto aplica no sólo a lo político, también a la música que actualmente ha favorecido a los artistas independientes, a las mujeres cantantes y compositoras y a las mujeres en general, que hoy están unidas y hablan de cosas como la violencia, que alzan la voz, juntas.
Ella, por su lado, se dice feliz de haber elegido la música porque todo está conectado: la música, el periodismo (que ejerció antes) y el dibujo (ella misma diseña sus discos). Cuando tuvo que decidirse por la música, recuerda, nunca tuvo miedo ni expectativas, porque si no pegaba una cosa, haría la otra, o la otra, o la otra.
¿Cómo sería entonces su
próximo álbum?
“El cuarto disco será una consecuencia de mis encuentros con otros artistas y otras culturas, ya no me imagino haciéndolo sin colaboraciones y pienso que no solamente va a ser en Brasil que grabe”.
