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Puede sonar raro, pero Diana Bracho no cuenta con ninguna de las más de 40 película dirigidas por su papá, Julio Bracho, en formato casero.

“Pero las tengo prometidas por parte de la Cineteca (risas) que las está rescatando!, indica la actriz, horas antes de inaugurar hoy una retrospectiva del cineasta en el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York.

El problema de Diana no es raro, porque a excepción de algunos títulos como La sombra del caudillo, que le valió un veto laboral a su padre, no han salido en DVD o Blu-ray.

Eso sí, varias de ellas se encuentran en versión apócrifa en el mercado de Tepito, grabadas de televisión.

“Estoy en contra de la piratería en principio, pero me da gusto que se conserve la obra de él, aunque sea en Tepito”, comenta vía telefónica.

El ciclo contempla ¡Ay, qué tiempos señor don Simón!, Historia de un gran amor, Distinto amanecer, La corte de Faraón, Crepúsculo, Rosenda y La sombra del caudillo, todas hechas entre 1941 y 1960.

“Con ellas te das cuenta de la amplitud intelectual y creativa de mi padre, tocó todos los géneros, hablamos de una época de su vida que desgraciadamentre termina con La sombra del caudillo, pues a partir de ahí le dieron muerte civil, ya nadie le daba trabajo, ni le contestaban el teléfono”, señala.

El ciclo en el MoMa, llamado Between Twilight and Dawn: Julio Bracho and the Golden Age of Mexican Cinema, es el mismo que se proyectó en el festival de Morelia pasado, con la ayuda de la Filmoteca de la UNAM, la Cineteca Nacional y Fundación Televisa.

“La herencia de mi papá fue una biblioteca que se destruyó en un incendio, sólo se salvó precisamente el guión de La sombra del caudillo, con anotaciones de mi padre y se lo cedí a la Filmoteca de la UNAM”, expresa.

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