Unos salen con los ojos rojos, otros echando porras y algunos más en silencio. Todos coinciden en que pasar junto a la alfombra roja por la que descansan las cenizas de Juan Gabriel en el Palacio de Bellas Artes es algo indescriptible. "Como si estuviera él ahí presente", dice Francis, una mujer que pidió permiso en su trabajo para poder pasar a decirle adiós al cantante y que afortunadamente se lo dieron.

Catalina Silva cuenta que al pasar le pidió a Juan Gabriel que la llenara de bendiciones a ella y a su familia.

Doña Dulce María mientras tanto, sale de Bellas Artes y no puede dejar de llorar, luce  un traje de tehuana de Oaxaca, pero de luto. Recuerda que gracias a un trabajo en una tienda de discos en los años 70 conoció la música de Juan Gabriel y de ahí se convirtió en una fiel seguidora.

"Se vendía mucho, No tengo dinero, Adiós amor, Rocío Dúrcal con Cosumbres, Te sigo amando con Daniela Romo". Cuando pasó, dice, le dejó un ramo de flores y en su pensamiento le dijo: hasta nunca.

"Yo le dejé una imagen de la virgen de Guadalupe, se siente hermoso, hermoso, yo no lo creo y para mí no está muerto",  dice Alicia Fuentes.

Ernesto Vilchis por su lado, compartió.

"Cuando vas entrando es cuando se siente la fuerza, la vibra, se siente bonito. Créeme que es tan impactante que no te da tiempo ni de pensar, tratas de sacar la foto, el video y el recuerdo para ti y para tu familia" dijo otro asistente acompañado.

"Le dediqué una oración porque él fue amor para todos nosotros, él fue una persona muy lucho a muy sufrida pero nos dejó mucho amor a los mexicanos" platica Guadalupe Olvera.

cvtp

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses