Lo aniquila el calor

Miami.— El español Rafael Nadal se despidió de manera prematura en el torneo de tenis de Miami al perder en su debut por 6-2, 4-6, 0-3 y abandono ante el bosnio Damir Dzumhur, en un partido en el que el ex número uno del mundo mostró visibles síntomas de cansancio y sufrió una baja de presión, producto del intenso calor.

Después de un cómodo primer set en el que quebró dos veces el saque de su adversario y se impuso por 6-2, Nadal, quinto en el ranking mundial, comenzó a bajar su nivel de juego y permitió el crecimiento del bosnio.

Los más de 30 grados y la humedad en el Crandon Park hacían mella en su físico.

En el cierre del segundo set y en el inicio del tercer parcial, el español comenzó a exhibir sus inconvenientes físicos, que incluso motivaron que un fisioteraupeta le tomara la presión en plena cancha.

“Intenté aguantar, pero tenía miedo de estar demasiado mareado y perder el conocimiento en la cancha”, dijo Rafa en conferencia de prensa.

Tras ese hecho, Nadal regresó al partido con un quiebre de desventaja en el set decisivo, pero Dzumhur aprovechó la baja presión del español para aumentar su ventaja. Fue entonces cuando el quinto preclasificado decidió abandonar el partido, tras una hora y 50minutos de juego.

“Eran sensaciones demasiado raras y complicadas como para poder seguir”, explicó.

El cuadro individual masculino del Masters se quedó sin Nadal, además del suizo Roger Federer, quien se retiró en la jornada del viernes, así como su compatriota Stan Wawrinka, eliminado ayer por el ruso Andrey Kuznetsov.

Wawrinka hizo un partido flojo en el saque, con apenas el 53 por ciento de sus primeros servicios en juego y 65 por ciento de puntos ganados con su primer saque.

El número cuatro del mundo sólo aguantó 1:19 horas en cancha.

El francés Jo-Wilfred Tsonga eliminó a Santiago Giraldo por un rotundo 6-3 y 6-1 en un partido en el que el colombiano no sacó partido de una de sus armas, el saque.

Giraldo sólo pudo poner en juego el 35 por ciento de sus primeros servicios, lo que permitió a Tsonga, noveno cabeza de serie del torneo, restar con rotundidad para marcar un choque que únicamente duró 66 minutos.