adriana.reyes@eluniversal.com.mx

Toronto.— Apenas un segundo fue suficiente. Un esfuerzo con más corazón que fuerza. Crisanto Grajales se vistió de héroe en el Ontario Place West Channel y venció ayer en un cierre cardiaco al estadounidense Kevin McDowell para convertirse en campeón panamericano de triatlón en Toronto.

Su medalla, la número tres para la disciplina en tierras canadienses, no sólo fue  el tercer oro para México sino que además le otorgó a nuestro país una plaza para los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro 2016.

Redondeó la actuación nacional Irving Pérez quien se llevó el bronce.

“Estamos haciendo historia, trabajamos por estas medallas por mucho tiempo y esta es nuestra recompensa. Terminé muy dañado físicamente pero valió la pena”, dijo Grajales.

Una lesión en la espalda detectada hace un par de semanas no fue suficiente para mermar la garra del competidor veracruzano, quien se quitó el sabor amargo de un sitio 13 en los Panamericanos de  Guadalajara 2011.

“Hace dos semanas me lastimé y no pude entrenar la carrera, sólo troté diez minutos antes de iniciar hoy [ayer] y fue suficiente”, dijo el competidor de 28 años de edad quien cruzó la meta con tiempo de 1h 48m 58s.

La inteligencia fue la clave. Aunque Grajales nunca se despegó del grupo puntero tampoco se desgastó de más tratando de mantenerse siempre entre los tres primeros.

Su reserva de energía la utilizó para el dramático final. Un inesperado colofón que ya esperaba el estadounidense. Su próximo rival cruzó la meta un segundo después con de 1h 48m 59s.

“Trabajamos en equipo, tratando siempre de jalarnos. La experiencia te hace aprender que no es bueno desgastarte mucho desde el principio de las competencias”, añadió el triatleta quien fue felicitado por el gobernador de su estado Javier Duarte.

No es casualidad que Crisanto porte el metal dorado en el pecho. La mejora en el desempeño del seleccionado se debe en buena parte a sus entrenamientos en Europa junto al que considera el mejor triatleta del mundo Javier Gómez.

Eugenio Chimal, su actual entrenador, ha sido también parte fundamental para que el seleccionado ocupe actualmente el décimo lugar del ranking mundial.

“Lo conseguido hoy [ayer] es un título que motiva, que me hace pensar que puedo estar en un buen lugar en Río de Janeiro.  En Londres me quedé lejos de los primeros sitios y no quiero que eso vuelva a suceder”.

A Irving Pérez (1h49m05s) el deporte le hizo justicia. Luego de intentar clasificar a dos ediciones anteriores a los Panamericanos,  al fin pudo convertirse en seleccionado nacional y no sólo eso, regresa a casa con una medalla.

“Busque asistir a Guadalajara 2011 y a Río de Janeiro 2007 pero no pude por lesiones o porque simplemente mi cuerpo no daba lo suficiente para hacer las marcas. Toronto fue mi desahogo y estoy muy feliz por mí y por el triatlón mexicano”, dijo.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses