Los barristas del América utilizan las puertas del tren ligero que tienen prioridad para mujeres, personas con capacidades diferentes y de la tercera edad.
Como medidas de prevención, los policías colocan a los “hinchas” azulcremas en esa zona del transporte público y relegan a quienes tendrían que entrar por esos accesos a ocupar el resto del andén en la estación Tasqueña.
Al ser gratuito el servicio, el tren ligero se encuentra al máximo de su capacidad y entre empujones y golpes, los usuarios batallan para subirse.
Hay servicio especial directo al Estadio Azteca a dos horas y media del duelo entre América y Santos por la vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones de la Concacaf.
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