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Una irónica sonrisa dibuja Matías Vuoso, cuando se entera que Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, asegura que el delantero no ha ingresado una demanda —ante la Comisión de Conciliación y Controversias— por los salarios que le adeudan el Atlas y los Jaguares de Chiapas.

Según el ‘Toro’, los Rojinegros deben pagarle cuatro meses de salario, mientras que los sureños un par.

“Sí la metí. Creo que el señor Bonilla no está muy enterado”, acusa el goleador. “Sí está puesta la controversia con Atlas. Tengo el número de expediente y todo, por si quieren que lo muestre... No tengo problema”.

“Más que nada, hay que hablar sobre bases, con cosas puntuales, pero es un tema que voy a tratar de dejar a un lado y concentrarme [en jugar]”.

Bonilla ha revelado que la directiva de los felinos tiene el compromiso de finiquitar sus deudas, a más tardar, pasado mañana. El refuerzo del Cruz Azul lo toma con bastantes reservas, porque recuerda que esta situación “cambia día a día, pero hay cosas que uno escucha y no son. Me quiero quedar callado, porque —a veces— cuando uno habla es peor”.

A final de cuentas, sabe que ambos clubes deberán pagarle.

Eso explica su deseo de enfocarse en su azul presente. El argentino, naturalizado mexicano, ha vivido semanas complicadas, pero su actual director técnico valora el profesionalismo que le distingue.

“A Matías lo tuve un año completo en Chiapas y siempre estuvo presente esa dificultad [retraso en pagos]”, comparte Sergio Bueno, entrenador de los Cementeros. “Hizo un gran año futbolístico, porque —aunque es parte de lo mismo esta situación contractual— externamos al plantel que, pasando la raya o entrando a la cancha, el jugador se tiene que concentrar en su trabajo y lo que haya que arreglar después de un entrenamiento, partido, hacerlo con la misma fuerza, pero él está contento en el equipo, no distraído”.

Postura asumida por el propio timonel, quien es otro de los muchos acreedores que actualmente tiene la cuestionada directiva chiapaneca.

“Ese es un tema distinto totalmente, que se tendrá que resolver de la misma forma que lo está tratando de hacer uno, porque no nada más es Matías”, subraya. “Son más jugadores y también nosotros como cuerpo técnico. No se olviden que estuve en Jaguares, así es que venimos arrastrando esa situación, pero no estamos distraídos, sino muy convencidos de lo que hacemos. Es una situación que se resuelve en otras instancias y uno tiene que saber desvincular todo”.

Vive la etapa más dulce de su carrera como timonel, pero Bueno revela que está al pendiente del progreso en el caso. Está seguro de que se saldará la deuda, porque tiene buena relación con los altos mandos de los Jaguares.

“Es un tema que ya está abordado de mucho tiempo atrás, pero tengo mucha confianza en que se resuelva, porque conozco muy bien a los [López] Chargoy. Se tardan, pero pagan”, afirma. “Acá, el asunto es no desesperarse y es una situación que siempre le hice ver a los jugadores de Chiapas: habría que tener paciencia, entender en qué equipo se está, porque la economía de un club es distinta a la de otro”.

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