Los escritores Elena Poniatowska, José de la Colina,  Ignacio Solares, Adolfo Castañón, Danubio Torres y el artista Manuel Felguérez participaron en la mesa de análisis "A 45 años de Plural", la revista que fundó Octavio Paz en 1971, en el marco de la exposición "Kazuya Sakai en México 1965-1977", que se presenta en el Museo de Arte Moderno.

Plural, dijo Poniatowska, fue una revista que reunió a muchas voces bajo el liderazgo de Octavio Paz, "quien batalló contra los ideólogos, y desde allí promovió su versión de la democracia y ahí conjuntó la creación y la crítica".

"Plural nos situó en el concierto de las literaturas del mundo y gracias a ella podíamos leer a autores que nos abrían una puerta antes ignorada", sostuvo.

"Recuerdo la fundación de Plural en octubre de 1971, al regresar de la India porque había renunciado a la embajada como protesta por la masacre del dos de octubre de 1968, Octavio Paz pensó en fundar una revista porque siempre fue un hacedor de revistas. De Barandal a Vuelta, en pocos países puede verse la continuidad que logró Paz en las revistas literarias que promovió. En América Latina crear y mantener una revista literaria es una faena", agregó Poniatowska.

La escritora recordó que en la publicación participaban Danubio Torres Fierro, José de la Colina, Salvador Elizondo, Juan García Ponce, Alejandro Rossi y Tomás Segovia, a quienes llamó "Los guapos". Así como Gabriel Zaid, "el deslumbrante", mientras que el diseño era del pintor argentino de origen japonés Kazuya Sakai.

"La revista duró de octubre de 1971 al 8 de julio de 1976, los años del echeverrismo, los años de don Daniel Cosío Villegas y del Excélsior de Julio Scherer García. Scherer contó en incontables ocasiones cómo le emocionó la renuncia de Octavio Paz", indicó la autora de La noche de Tlatelolco.

Adolfo Castañón recordó cuando publicó una reseña crítica de Terra Nostra de Carlos Fuentes. "Octavio Paz me la encargó puntualmente y mirándome a los ojos. Él tenía muy claro que la revista debía tener un artículo en pro y otro más crítico, pensó que yo podía escribir el crítico. Y lo hice. Cuando lo entregué tuve una larga conversación con Octavio, que versaba en torno a la presencia de la mujer en Terra Nostra y a las vertientes misóginas en el pensamiento del autor. Octavio Paz no era un buzón, es decir, no era de los editores que reciben textos y los publica, no, él discutía, retocaba y revolvía, eso le dio una levadura a la revista", aseguró.

Por su parte, Ignacio Solares, coincidió en las exigencias de Octavio Paz al revisar los textos que se publicaban en la revista. "La capacidad de trabajo de Paz no conocía límites, revisaba y corregía hasta la última nota de la revista, fuera de quien fuera. Cambiaba párrafos, agregaba ideas, retocaba los estilos, incluido el suyo. En más de una ocasión le leí la revista por teléfono, porque viajaba constantemente. Aun así no se le escapaba una coma mal puesta y le era difícil comprender que a alguien se le pudiera escapar una coma mal puesta", dijo.

José de la Colina aprovechó para advertir que en el centenario del nacimiento de Elena Garro que se ha recordado durante este año, continúa circulando la "mentira" de que Paz "torturaba" económicamente a la autora de Los recuerdos del porvenir y a su hija Elena Paz.

"Yo quiero dejar muy claro que no es verdad que Octavio Paz las abandonó y menos que tuvo en exilio a Elena Garro", dijo.

Y agregó: "Plural no sólo abrió puertas al arte y  a la literatura, sino a una renovación política de todo el ganado que formábamos los escritores e intelectuales, abrió ideológicamente la brecha a tal modo que durante un tiempo se llegó a decir que era una revista financiada por el FBI y la CIA, se llegó a decir cosas monstruosas. Hay que decir que Plural fue atacada ideológicamente".

sc

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