ruben.migueles@eluniversal.com.mx

Si la reducción del gasto y del superávit primario se confirman en el presupuesto para el próximo año, las preocupaciones sobre la deuda pública deben empezar a disminuir hacia delante, después de ser un factor que afectó a algunas variables financieras domésticas como el tipo de cambio en los últimos meses, estimó el grupo financiero BBVA Bancomer en un análisis sobre los planes fiscales anunciados el viernes pasado por la Secretaría de Hacienda.

El presupuesto de 2017 presentado por las autoridades fiscales implica una reducción al gasto programable de 311.8 miles de millones de pesos, equivalente a 1.5% de PIB. Considerando el ajuste de gasto anunciado en febrero por 132.3 miles de millones de pesos (0.7% de PIB), más el ajuste adicional requerido por 175.1 miles de millones (0.9% de PIB).

Dichos ajustes implican que el déficit público en 2016 y 2017 sea de -3.0% y -2.5% del PIB, respectivamente, mientras que los saldos del balance primario de -0.6% en este año y 0.2% del PIB en 2017, el primer superávit primario desde 2008.

Los especialistas de BBVA advierten que estas cifras aún no consideran la posible transferencia de las ganancias del Banco de México que debe ser anunciada esta semana, pues la ley establece que estas ganancias se utilizan para reducción de deuda, además de alcanzar un superávit primario en 2017, el próximo año también puede marcar el inicio de la estabilización de la deuda como porcentaje de PIB después de varios años que había tendido al alza.

Los Requerimientos Financieros del Sector Público crecieron 8 puntos porcentuales del PIB entre 2012 y 2015, al pasar de 37.7% del PIB en 2012 a 45.7% en 2015.

Si adicionalmente al superávit primario, se siguen dando anuncios con implicaciones de mayor eficiencia en el gasto de Pemex a mediano y largo plazos que reduzca las incertidumbres sobre su situación financiera, en BBVA Bancomer prevén que se puede fortalecer la percepción de responsabilidad fiscal de México y se logra una deseable diferenciación positiva en los mercados frente a otras economías emergentes.

Los ajustes fiscales potencialmente pueden ayudar al peso mexicano durante 2017 si otros factores no eliminan el efecto favorable que supondría un mejor panorama para las finanzas públicas.

El análisis de BBVA Bancomer reconoce que la reducción adicional en el gasto público implica una menor contribución de este componente al crecimiento económico.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses