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Aunque hay más facilidades y herramientas tecnológicas, los contribuyentes aún desembolsan importantes cantidades de dinero para cumplir sus obligaciones fiscales.

Las personas físicas gastaron en promedio 11 mil 361 pesos en transporte, viáticos, papelería, copias, internet y honorarios para el contador que lo asesoró. Pero lo más importante es el tiempo que invirtieron en cumplir ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Para las empresas, el costo fue de 91 mil 933 pesos, considerando todo lo anterior, más los sueldos y salarios del contador o por la contratación de un despacho fiscal, según datos de la Secretaría de Hacienda.

La información sobre el costo que representa estar bien con el fisco es con base en los resultados de las encuestas telefónicas que realizó el SAT a contribuyentes entre el 27 de febrero y el 7 de marzo de este año.

Hacienda hacen grandes esfuerzos para que su brazo fiscal simplifique la vida a los contribuyentes, con el apoyo de la tecnología.

Por segundo año consecutivo, el SAT puso a disposición de los contribuyentes que son personas físicas, la declaración de impuestos prellenada, que se podía descargar en el sitio web del organismo.

Sin embargo, Teresa Hernández, una psicóloga que gana por honorarios, pagó más a su contadora que por lo que ganó por sus servicios profesionales. “De lo poco que estoy recibiendo por dar clases y por las consultas, más de la mitad se me va para pagar a la contadora”.

De sus honorarios, la gran parte los destina para la contadora y una mínima cantidad para los impuestos, porque no tiene ingresos fijos, y lo poco que le queda es con lo que sobrevive para sus gastos propios.

Como Teresa, hay muchos mexicanos que aún recurren a un contador para llevar sus cuentas, porque dice que no sabe qué gastos puede deducir o cuáles disposiciones fiscales están vigentes con relación a la declaración mensual informativa, o la anual, pues en su caso después de muchos años de haberse dedicado al hogar, ahora que es separada se está reincorporando a la vida laboral y está desconectada del mundo fiscal.

El SAT tiene en su base de datos un universo total de 59.4 millones de contribuyentes registrados, de los cuales 1.8 millones son empresas y 57.5 millones personas físicas con y sin actividad empresarial.

En el primer trimestre del año, poco más de 25 millones de contribuyentes hicieron uso de los recursos informáticos del SAT, de los cuales 1.5 millones fueron para la declaración anual; 234 mil 229 para las declaraciones informativas; 7 millones para declaraciones informativas de operaciones con terceros, y el mayor número para las declaraciones provisionales o definitivas de impuestos federales, con 15.1 millones.

Indicadores de servicio. Como parte de los indicadores de servicio al contribuyente, el SAT pide que califiquen ciertos rubros que tienen que ver con la atención recibida.

En el tiempo que invirtieron para un trámite relacionado con el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, la evaluación pasó de 7.81 a 8, en una escala de cero al 10.

En atención personal de los funcionarios, bajó la calificación de 8.62 a 8.45, mientras que en calidad del lugar obtuvo 8.91, contra 8.80 entre enero y marzo de 2016.

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