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Como consecuencia de su salida de la Unión Europea, el bloque británico negociará un tratado de libre comercio ya sea con México individualmente, o con los cuatro miembros de la Alianza del Pacífico –Chile, Colombia, México y Perú–.

Se buscará que los acercamientos se lleven a cabo sin importar si iniciaron o no los trámites para concretar el proceso mejor conocido como Brexit, aseveró el embajador de Reino Unido en México, Duncan Taylor.

Recordó que el resultado del referéndum que significó la salida de Gran Bretaña del bloque europeo “fue una sorpresa” para él, pero incluso hasta para quienes promovían la salida, y el resultado ha sido la generación de incertidumbre, la cual se mantiene hasta ahora.

A pesar de ello, confió en que al final de cuentas el proceso de separación será un “Br-éxito”.

“La incertidumbre después del voto se dio porque fue una sorpresa para la mayoría, pocos pensaban que iba a ganar el Brexit”, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL.

“Seguimos con la incertidumbre, porque no podemos saber exactamente cómo van a terminar las negociaciones con los otros países de la Unión Europea, pero eventualmente tendremos una idea más concreta y específica de cómo será la relación”, expuso el diplomático.

Como resultado del referéndum llevado a cabo en Escocia, Irlanda del Norte, Inglaterra y Gales los británicos deben presentar una petición para salir del bloque, pero aún no se sabe cuándo se iniciará la separación.

Para Taylor, sería complejo que Escocia dijera que siempre no quiere salir de la UE, luego de que hace un par de años hubo otro referéndum para decidir a favor o en contra de permanecer en el bloque británico. “La única manera de que Escocia se quede con los europeos es que salga de Reino Unido, y luego se adhiera a la Unión Europea”, expuso.

Comentó que en cuanto se convoque el artículo 50, es decir que se notifique formalmente la solicitud para abandonar a la Unión Europea, se contará con un plazo de dos años para concretar el procedimiento, detalló.

Ello significa que si a fines de este año comienza el proceso, podría ser hasta fines de 2018 cuando se haga efectiva la salida de la UE.

De aquí a 2019 habrá oportunidad de negociar la relación que se tendrá con los otros países, una vez que se dé la salida, y también se comunicará a los mercados y a las personas lo que se busca lograr.

Admitió que todavía no queda claro si podrán tener licencia para negociar tratados de libre comercio con países abiertos como México, o si para hacerlo deberán esperar hasta que se consiga la salida de la Unión Europea.

En todo caso, “no veo ningún inconveniente para negociar un acuerdo bilateral de vanguardia con los países que están más genuinamente comprometidos con el libre comercio”, expuso Taylor. También consideró que la salida de los británicos del bloque europeo no es por populismo, pues hay cuestiones migratorias, así como por el hecho de que no todos los países que integran la Unión Europea están comprometidos con la unión política.

Durante una mesa de diálogo sobre el llamado Brexit, el presidente de Monex, Héctor Lagos, dijo que en un escenario negativo la separación tendrá altos costos y complicará el ambiente de negocios. Por ejemplo, las empresas que tienen su base en Inglaterra tendrían que conseguir licencias para operar en otros países europeos.

Pero, una de las ventajas es que al separarse de la Unión Europea y perder los tratados de libre comercio que tienen con otros países, podrán negociar nuevos acuerdos, explicó el socio de Ernst & Young, Narciso Suárez.

Los nuevos tratados podrían integrar disciplinas que antes no se consideraban y que se apeguen más a las necesidades del bloque británico, además de que “es más fácil tomar una decisión solo que con 27 países”, añadió.

Para el presidente de la Cámara Británica de Comercio, Emilio Díaz, el problema no es el nerviosismo, sino la “incertidumbre” porque con la Unión Europea puedes estar dado de alta sólo con tener un local en Reino Unido y puedes hacer negocios en cualquier otro país de la zona. A partir de la salida, se tendría que establecer un local en una economía que sí forme parte de la UE, dijo.

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