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El desafío para el sector turístico nacional es consolidarse como uno de los principales motores de crecimiento del país, incorporar a las pequeñas y medianas empresas a la cadena de proveeduría de la industria, además de desarrollar una propuesta inclusiva para todos los mexicanos, aseguró Enrique de la Madrid, secretario de Turismo.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el funcionario prevé continuar con la racha de crecimiento en la captación de divisas provenientes de visitantes extranjeros y añadió que habrá interés por impulsar el turismo médico y de retiro, como una estrategia para aprovechar la cercanía con el mercado estadounidense.

De la Madrid, designado titular de la Sectur el pasado 27 de agosto, dijo que México debe convertir en una oportunidad el nuevo escenario en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, a través de ofrecer paquetes integrales para visitar la isla y el territorio nacional, pues de lo contrario ese factor podría convertirse en una amenaza.

Por otra parte, el funcionario manifestó que los cambios en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto responden a una estrategia para ejecutar las reformas estructurales alcanzadas en los primeros tres años de gobierno, aunque dejó en claro que ninguno de los integrantes del primer círculo del Ejecutivo debe pensar en 2018.

El hijo del ex presidente Miguel de la Madrid dijo que una de las razones de los ajustes en el gabinete tiene que ver con dar respuesta a las inquietudes de la sociedad.

¿Esperaba los cambios en el gabinete [presidencial]?

— No te esperas la invitación específica a una dependencia. Ser parte del gabinete y convertirme en secretario de Estado era algo que anhelaba. Te mueves, trabajas y tratas de hacer bien tu labor, para que si en algún momento consideran que tu aportación es útil, lo tomen en cuenta.

Para mí es muy satisfactorio que me hayan invitado y sobre todo que fuera en la Secretaría de Turismo. He ido descubriendo habilidades en mí como promotor, la actividad en el sector es muy dinámica, creo que es uno de los motores de crecimiento.

Uno sabe que esto es de circunstancias, se tienen que dar muchos elementos y al final del día lo veo como un reconocimiento al esfuerzo hecho, pero también como un reconocimiento a la institución donde provengo.

Recibe a la Sectur luego de que México regresó al top ten de países más visitados. ¿Cuál es su meta como secretario de Turismo?

—Algunos objetivos serán cuantitativos. Por ejemplo, cuántos turistas adicionales llegaron al país, cuántas divisas adicionales se generaron, pero también me gustaría poner cualitativos; por ejemplo, se ha venido trabajando en un programa sobre hacer una oferta de turismo para todos, que no se vea al turismo como una actividad elitista.

Hacer una oferta turística para los diferentes segmentos y capacidad de bolsillo de los mexicanos.

Otro tema personal desde hace tiempo, y también el Presidente lo ha manifestado así, es cómo incorporar más a las empresas medianas y pequeñas a la cadena de proveeduría del sector.

Consolidación del sector como uno de los principales motores de crecimiento, turismo para todos y el tema de cómo hacer proveedores a pequeñas y medinas empresas, son las áreas más importantes.

En la parte política, ¿qué le dicen estos cambios en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto rumbo a 2018?

—El Presidente está mandando una señal a la sociedad, antes ha habido la percepción de tener cambios y no se habían dado. Al que debemos oxigenar es al equipo [del Ejecutivo] y todos los demás somos fungibles. Al que debemos de cuidar es al Presidente.

También hay que ver que la cultura mexicana siempre ha planteado que los gobernantes no reaccionan cuando la gente los presiona, si la sociedad pide cambios al mandatario y éste reacciona, entonces es débil. Yo lo veo al revés, y el Presidente está mostrando que también lo ve así, es decir: un Presidente que escucha y reacciona a lo que le piden es fuerte.

Yo no sería quién para juzgar todos los cambios. Los primeros tres años [de gobierno] fueron muy buenos, se hicieron 11 reformas estructurales. A veces debes de decir: ‘ése fue el equipo que arrancó para hacer los cambios, ahora quiero gente para ejecutar y operarlos y aterrizarlos’. Es la etapa en la que ahora está el gobierno.

Con estos cambios, ¿no se ha pensado en tener posibles sucesores a la Presidencia?

—Ahora estamos en la etapa de consolidación, de trabajo. El tiempo que hay debe dedicarse a que las reformas estructurales den resultados y seamos capaces de lidiar con la adversidad internacional. Yo creo que México está mejor posicionado en comparación con otros países.

No creo que el Presidente haya pensado en eso [un sucesor] y ninguno de los que entró debe estar pensando en eso, en lo que deben de pensar es en cómo cumplirle a esta etapa.

¿Cuál es el panorama para el turismo en México? Ha tenido un año récord en divisas captadas, ¿podrá superar este crecimiento?

—Mi percepción es que vienen cosas buenas y obviamente el reto es continuar ese ritmo. A mí me gustan las cifras e iremos sofisticando el análisis.

Más que ver la cifra bruta, ver la cantidad neta: entran 16 mil millones de dólares, pero cuánto sale de los mexicanos, cuánto te queda. Así como vienen extranjeros, salen mexicanos. Mi percepción, sin meterme mucho en las cifras, es que ese número va a mejorar porque van a pasar fenómenos.

Por un lado, tienes a un peso depreciado por factores internacionales y el tema de la amenaza de la Reserva Federal de Estados Unidos. El peso mexicano se ha depreciado más de lo debido y eso hace que para los extranjeros se vuelva más competitivo venir a México, pero también para los connacionales se nos hace más caro salir del país, entonces viajan más dentro.

La nueva relación entre Cuba y Estados Unidos, ¿impactará de manera negativa al sector?

—En Bancomext teníamos un adeudo a favor con el gobierno cubano. El presidente Peña Nieto siempre puso mucho empeño en esto, los acontecimientos le dieron la razón, le puso atención al tema de la isla y nos dio las instrucciones para ver cómo podíamos llegar a un arreglo financieramente bueno para Cuba y para el banco.

Hicimos una reestructura, al final del día los cubanos habían pagado todo el capital y lo que hicimos fue una condonación de intereses moratorios y aun así quedó un saldo de 140 millones de dólares, pero eso nos permitió acceso y relación con Cuba.

Vamos a ver en qué consisten las nuevas reglas y dependerá de los mexicanos que Cuba no sea una amenaza y se convierta en una oportunidad.

Claro que tiene un atractivo especial, los extranjeros van a querer ir a Cuba, y si lo logramos vender como un paquete integral, por ejemplo, que pasen unos días en la Habana y luego pasen a Cancún y vean la Riviera Maya, será una oportunidad. Si no lo vinculamos, pues vamos a competir y me parecería un error no verlo como una oferta.

¿Cuáles serían las áreas estratégicas donde ve mayor potencial?

—Los temas en donde veo mayor interés y que el Presidente también me ha dicho que puntualice son turismo médico y de retiro.

Al lado de la economía más grande, el consumidor más importante, aquí tenemos hospitales, médicos y enfermeras de calidad a precios competitivos, tendría que ser una industria poderosa, articulada, que no le permita a un estadounidense irse a Turquía o Costa Rica a hacerse una operación, sino que lo haga en México.

El otro es el turismo de retiro. Hay más de un millón de extranjeros en México, con la ventaja de que les cuesta una tercera parte vivir aquí en comparación si vivieran en su país.

Sobre la inseguridad que afecta a zonas, ¿cuál es su diagnóstico?

—No podemos desconocer el tema de la inseguridad a nivel nacional, nos preocupa no sólo por los turistas extranjeros, sino como mexicanos. Es un elemento que tiene una mezcla de realidad y percepción. A veces desgraciadamente las caricaturas provocan que muchos no quieran ir a un lugar.

La inseguridad también tiene otro componente: el desarrollo económico. Así como combates el crimen, debes dar opciones económicas viables a los jóvenes. Si no damos alternativas económicas, empleo digno y bien pagado, estamos generando condiciones para que este otro lado [la inseguridad] se vea favorecido. Sí es combatir al crimen, pero también generar alternativas de desarrollo económico.

Se han presentado diagnósticos sobre zonas turísticas muy afectadas, como Acapulco, Michoacán y Morelia. ¿Cuál es su perspectiva?

—Hay percepción y parte de realidad en estas zonas que tienen problemas de seguridad importante, primero lo que me toca es ir a conocer la realidad y contrastar esos datos. A mi me tocará salir a Estados Unidos, juntarme con entidades, promotores de turismo, y comparar cifras.

Hay que ir a hablar con la verdad y tratar de corregir, dialogar con las comunidades para poner en orden.

Usted ha comentado que es del equipo de Luis Videgaray. ¿A muerte con el secretario de Hacienda?

—Soy colaborador del doctor Videgaray, mi amistad y mi reconocimiento. Ahora soy miembro del gabinete del presidente Enrique Peña Nieto. No me hago bolas, el presidente me invitó, me dio esta oportunidad.

¿El recorte al gasto implica algún riesgo para sus objetivos?

—Trataré de ajustarme para que nos pegue en las áreas donde afecte menos. Este negocio en particular no es de mucho dinero, es de mucha coordinación, juntar bolsas y ponernos de acuerdo.

Hacia el exterior, ¿tiene los ojos puestos en algún sector? La mayoría de visitantes viene de países muy definidos: ¿Tienen en la mira a China o Rusia?

—China está a 14 horas, entonces no es casualidad que sean los estadounidenses y canadienses tus primeros clientes. En exportaciones a veces hay que diversificar, pero yo digo que a Estados Unidos hay que venderle más.

Son temas de conectividad para que los vuelos sean más accesibles, se ha avanzado en inversionistas chinos en turismo; si logras traer a inversionistas, ellos van a traer a turistas. Estados Unidos es un mercado natural, hay que ver cómo levantamos esa cifra.

En cuanto a España, son más de 300 mil los que vienen, pero hay más de 40 millones de españoles, por lo que debemos de buscar más visitas. Ellos sí tienen vuelos directos a Cancún; si queremos ingresos más altos, debemos ir a países con los recursos más altos.

¿La falta de conectividad aérea es un impedimento? ¿En los cruceros también hay rezagos o barreras para el crecimiento del sector?

—Sin duda la conectividad es fundamental para que los destinos florezcan. Manzanillo, Ixtapa Zihuatanejo, Huatulco no crecen más porque no hay vuelos, porque no hay cuartos, ese tema lo complica. Me concentraré en tratar de desatorar los primeros temas de conectividad que estén próximos en resolverse, es un diálogo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). Platicaré con ellos para conocer sus puntos, queremos accesos fáciles y llegadas, sobre todo, a precios competitivos. Todos sabemos que los precios pagados para viajes en el interior del país son carísimos y es absurdo que llegues a la conclusión de ir a Nueva York en vez de ir a Campeche.

Los cruceros entiendo que este año han mejorado y se está trabajando en un borrador para que el Presidente pueda anunciar una política sobre ese tema. México es precioso, pero hay otros lugares, productos, innovación y debemos mejorar la oferta turística para seguir siendo atractivos.

¿El tema de la política de migración del país representa alguna limitante? Para el turismo latinoamericano es complicado venir a México.

—Con el riesgo de ser criticado, pero con el ánimo de que así debemos hablar ahora, es indignante llegar al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México desde países latinoamericanos. Primero te tardas horas, segundo te echan los perros, parece que dicen: “no vengas, es que hay un problema de drogas”. Pues pensemos cómo lo atendemos, pero si por cuatro que vienen así afectas a 500 personas al día, la pregunta es qué imagen se da.

A mí me ha tocado ir de trabajo y el regreso es terrible, encontremos maneras más inteligentes de resolverlo, es un tema que platicaré con autoridades migratorias. La experiencia debe ser desde que compras un paquete en internet y después cuando llegas y permaneces. En los negocios es difícil retener al primer cliente, los turistas deben decir: ‘me fue bien en Cancún, ahora iré a Pueblos Mágicos o la sierra’, éste es uno de los principales activos y debemos de hacer muchas cosas para potenciarlo más, para que el nivel de ingresos sea mayor.

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